La Guardia Civil expulsó ayer a más de una decena de
pequeñas embarcaciones pesqueras marroquíes que faenaban en
aguas españolas. El Servicio Marítimo del Instituto Armado
operó en aguas de las bahías norte y sur donde las barcazas
de Marruecos habían fijado su lugar de pesca, a escasa
distancia del puerto en un caso y de la orilla en el otro.
Decenas de pequeñas embarcaciones de pesca marroquíes
faenaron ayer en aguas españolas de las bahías norte y sur
de Ceuta a escasa distancia de la costa.
El Servicio Marítimo de la Guardia Civil necesitó operar en
dos puntos equidistantes para expulsar a las embarcaciones
de las aguas jurisdiccionales próximas a Ceuta. A primeras
horas de la mañana el Instituto Armado retiró casi una
decena de barcos marroquíes que faenaban cerca de las aguas
próximas al Puerto en la bahía norte.
Mientras eso ocurría frente a las aguas de la Playa Benítez
y Calamocarro, casi una veintena de barcos del país vecino
se adentraban en aguas españolas por la bahía sur, donde
permanecieron faenando durante más de sesenta minutos hasta
que poco antes de las 14:00 horas una de las embarcaciones
neumáticas de la Benemérita llegó a la zona.
Una a una, las que estaban más próximas a la playa de la
Ribera, fueron poniendo proa hacia aguas más profundas
(frente a Castillejos). Las que se encontraban más alejadas
recogieron sus artes y marcharon hasta el límite con
Marruecos.
No obstante, la Guardia Civil tovo que realizar varias
‘pasadas’ cerca de algunos de estos pesqueros que tardaban
más de lo necesario en arrancar motores y salir de aguas
españolas.
Según fuentes de la Benemérita, estas situaciones son una
constante diaria. Una media de 8 embarcaciones deben ser
‘invitadas’ a abandonar aguas jurisdiccionales españolas.
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