Disculpen que les relate una
anécdota, pero es para que vean lo extraña que es la vida y
lo que es la sincronicidad. Doce de la noche del miércoles
23, hincando los codos sobre un libro de medicina
ortomolecular, un articulo a medio terminar y el ojo puesto
de cuando en cuando en facebook.
Entra mi amiga facebukera Dori Lustron “Cayeron dos misiles
grad en Beer Sheva fue cerca de mi casa pero estamos bien…me
hizo recordar a Naharia”. Me quedo helada. Sigue Dori desde
el sur de Israel “ Me había desacostumbrado y nos agarró de
sorpresa. Sonó la sirena y salimos todo el edificio para los
madregot porque el miklat del sotano está cerrado con
llave”. Mi amiga nos está contando en directo que les están
bombardeando, doy la alerta para que todos los que estemos
acudamos, a apoyar a Dori. Empieza a entrar gente de Sderot,
toda la peña de facebook, Benjamín Fachetti escribe “mi hijo
quedó nervioso y no quiere dormirse…eso no le sucedió
durante “Plomo Fundido” supongo que es porque esta vez
escuchamos más fuerte las explosiones”.
Facebook echa chispas, somos casi mil tan solo en sola peña
y hay muchos de otras a esta hora “estamos todos ahí y aquí
rezando” “aquí estaremos hasta que esto acabe” “¡ánimo
valientes!” “¿Dónde se ha metido la Tzahal?” Siguen los de
Beer Sheva “¿Dónde cayeron exactamente? Unos dicen que fue
en Najal Hashan y otros dicen en Guimel…ahora se están
escuchando bombazos, les deben estar bombardeando los
nuestros, ¡es la Tzahal…!”. Facebook se viene abajo, ha
corrido la noticia de que, nuestros amigos, lo están
relatando en directo, con el ánimo templado, desde los
refugios… La red no es una red sino una inmensa cadena de
oración, una plegaria mantenida de lado a lado del océano
,de esquina a esquina del mar, están amigos de toda
Sudamérica, los sefarditas de allí que son tan españoles y
hablan bonito, apoyando a quienes representan a su amada
Sefarad en el sur de Israel ¡hay tantos nuestros allí!
Hablando en román paladino, en nuestro antiguo ladino. Se
entremezclan los idiomas y Simy, nacida en Ceuta, tan linda,
tan talentosa, entra no sé donde y da la voz “¡Se acabó! ¡Ya
está!”.
Lo he vivido en directo, he tenido el privilegio de ser
testigo de la Historia, todos lo hemos tenido cada cual en
su rincón del mundo, aunados a la espera del siguiente
misil, preguntándonos donde habrá metido el portero la llave
del miklat del sótano, porque se le va a caer el pelo con
los vecinos. ¡Hay tantos sefarditas allí!. Y un rato antes
estábamos discutiendo sobre el origen de Simón Peres, que se
ha reunido con Rajoy, yo digo que es sefardita porque lo
dijo en facebook, pero un catedrático dice que no, que es
askenazi de Polonia y el apellido es Pereck, otro listo dice
que, si es de Polonia no es askenazi sino polack y yo que
no, que es sefardita Peres y que ha venido con la llave de
la casa toledana de su retatarabuelo y se ha encontrado con
que han levantado un bloque. Y la medicina ortomolecular
pregonando las bondades del piracetam que equilibra los dos
hemisferios cerebrales y el articulo congelado y Dori
contando el bombardeo de los misiles grad.
Rezos van, Mazel Tov vienen, se acabó, todos alborozados
haciendo comentarios con la Tzahal “yogurines de acero” y
cosas así. ¿Habrá paz alguna vez? Seguro que sí, es
demasiada gente la que está en oración, somos millones y
están por medio ese judío llamado Jesús, desasnado en la
sinagoga y su Santa Madre María, madre judía. Habrá paz.
Seguro que sí. La vida…¡Cómo es!.
|