Tanto la acusación particular como el representante del
Ministerio Público en la ciudad pidieron ayer a la jueza del
Penal número uno que dictase sentencia condenatoria contra
un hombre con la pena de dos años de prisión y 600 euros de
indemnización. Petición que fue rechazada por la defensa al
entender que la cifra económica no estaba justificada, en
primera instancia, y que era imposible, atendiendo a las
características temporales del suceso, que su cliente
hubiera sido el autor del delito de robo con fuerza que se
le imputaba.
El procedimiento tuvo su origen el pasado 11 de diciembre,
sobre la una de la madrugada, en los aledaños de la Avenida
Nuestra Señora de Otero, por el robo de unas gafas, una
radio, un gato y la rueda de repuesto; objetos que se
encontraban en el interior de un vehículo estacionado en
dicha zona y al que accedieron rompiendo un cristal. Sobre
estos hechos, el procesado alegó no tener nada que ver ya
que dicho día “me encontraba en casa porque había regresado
de fiesta”, añadiendo que le habían inculpado por haber
regalado la radio de su coche a un “yonqui” y este habría
dicho que el objeto era robado. Por su parte el denunciante
señaló con el dedo al encausado, argumentando haberlo visto
en el interior del vehículo desde la ventana de su casa y
escapar en el suyo propio, por lo que “anoté su matrícula y
la di en mi denuncia”, concluyó.
|