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Por tales les tienen en el Sancta Sanctorum de Génova 13 y
la verdad es que presentan similitudes más que evidentes con
aquellos artistazos, Manolo y Ramón, que allá por los
sesenta animaron nuestras niñeces y adolescencias. Las niñas
suspirábamos cuando cantaban aquello de “¡Quince, años,
tiene mi amooorrr…!” y eran lo “más” de la marcha y de la
modernidad, un estilo totalmente nuevo de hacer música.
Como Vivas e Imbroda, ambos Presidentes en
ciudades-escaparate de la UE, como son Ceuta y Melilla,
trajeron, en su día, un estilo novedoso de hacer
política-mucha-marcha. Por ser vos quien sois y por las
peculiaridades de sus ciudades siempre han estado bajo el
ojo del huracán, bregando con susceptibilidades en sus
respectivos vecindarios, tratando de conjugar y acrisolar
factores diferenciales y predicando el respeto, la educación
y la cultura como normas innegociables de convivencia. Y
aquí y allí la gente convive. Y van todos, sin diferencias
de razas ni de religiones, a comprar a Zara y a comerse un
pescadito donde se tercie, o a juerguearse a la feria cuando
toca.
Y, los Presidentes, que siempre han apostado por la cercanía
y por no blindarse jamás en sus Palacios de Invierno
(mayormente porque no los tienen, viven en casas normales).
En plan participativo, viviendo el pulso ciudadano desde
primera línea de las trincheras y sin delegar actuaciones
que pueden hacer en primera persona. Y eso complace, y
mucho, al electorado. Un electorado que, por estar
acostumbrado a ese contacto directo y personal con sus
gobernantes, no aprecia las diferencias abismales que
existen con la Península donde, los políticos, raramente
están a pie de calle y son bastante inaccesibles.
El estilo de hacer política del Dúo Dinámico Vivas-Imbroda,
encanta en Madriz con z y cuando añadan a las “e” de Ceuta y
de Melilla, la virgulilla identificativa de España con eñe,
que significa “Ceuta y Melilla son España” para berrinche de
ajenos, apuesten cualquier cosas a que, en Génova 13 se unen
a la propuesta y proliferan las E con virgulillas a modo de
sombrero cordobés o de peinetas para portar las mantillas.
Pero este Dúo Dinámico es mucho Dúo Dinámico y sus
intervenciones resultan vigorizantes para el electorado.
Porque son dos tipos que piensan y actúan en positivo, en
plan New Age y transforman las dificultades que conllevan
las diferencias, en ventajas y oportunidades de
enriquecimiento cultural. Y eso de “crisol de culturas” que,
desde las páginas de este diario venimos utilizando desde
hace años, consulten las hemerotecas, ese término, resulta
muy cautivador de cara al turismo que acude buscando un
escenario variopinto y lo encuentra.
A nivel Rajoy y camarilla, sé y me han dicho que, los
Presidentes Autonómicos de estas dos ciudades cargadas de
simbolismo y que, extendida la piel de toro de España,
aparecen abajo y a dúo en forma testicular diseñando los
atributos masculinos del astado, que estos dos máquinas, que
son pura polvorilla, les tienen obnubilados y se los quieren
llevar para los Madriles, pero ellos dicen que no, que no se
van de sus ciudades del alma aunque les echen con agua
caliente. ¿Ministrables Vivas e Imbroda? En todas las
quinielas, pero realmente hacen más falta en las ciudades
autónomas que, con tanto paseos marítimos, tantos jardines,
tantos chirimbolos y tantos pendeloques, cada vez parecen
más una recreación monegasca en el otro extremo del
Mediterráneo. De ahí el orgullo pepero ante sus históricos
triunfos en las ciudades, de ahí el simbolismo de cada
victoria y de cada logro conjunto. Ceuta y Melilla conforman
un todo con la piel del toro hispana y por la especial
sensibilidad de los atributos varoniles que representan, son
parte consustancial de nuestra geografía, a no ser que
permitamos que se nos quede el toro hecho un eunuco. Y
orquestando el invento Vivas e Imbroda, el Dúo Dinámico de
la política española. “Quince, años, tiene mi amooorrr…! Y
no es que les ponga plazos premonitorios a las futuras
mayorías absolutas, es que así dice la canción.
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OPINIÓN
/
COLABORACIÓN
