La magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 dictó ayer
sentencia condenatoria contra un hombre que admitió haber
cometido un delito de robo con fuerza en las cosas, recogido
en los artículos 237, 238 y 240 del Código Penal.
Por tales hechos, el acusado deberá hacer frente a una pena
de un año de prisión que quedaron sustituidos por dos años
de multa a razón de tres euros diarios además de la
correspondiente indemnización al perjudicado, lo que suma un
total de 2.160 euros.
El suceso denunciado tuvo lugar el 28 de noviembre de 2007,
cuando el procesado accedió a un garage privado situado en
la barriada Los Rosales. Tal y como aparecía en el relato
formulado por el representante del Ministerio Fiscal en la
ciudad, el imputado se coló en el lugar rompiendo el cristal
de uno de los turismos allí estacionados y del que sustrajo
varios objetos.
Durante la investigación para esclarecer lo sucedido, los
agentes del Cuerpo Nacional de Policía encontraron en el
vehículo las huellas dactilares del encausado, hecho que
motivó su posterior detención, y pasando a disposición
judicial.
Por todo lo expuesto, la jueza del Penal dictó sentencia
condenatoria a través de la figura jurídica de la
conformidad.
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