Eso es lo que parece, si nos
atenemos a las quejas frecuentes de los usuarios, con
respecto al material que no se arregla y que se va apartando
o aparcando.
Aquí no hay quien se pueda entender, de verdad, cuando de
instalaciones deportivas se trata. Y he dicho instalaciones
deportivas, y de las buenas, si tenemos en cuenta lo que
costaron.
Las instalaciones del polideportivo López-Díaz Flor han
sido, hasta hace poco, las instalaciones más caras que Ceuta
podía tener y su uso, de poco más de una docena de años, no
debiera implicar dejarlas abandonadas, poco a poco.
En su día, costaron un dineral, los proyectos, y digo
proyectos, implicaban recalificaciones de presupuesto, cosa
que unida a los parones en las obras, o el parón hasta la
puesta en funcionamiento, acarreó unos gastos que no sé
quien, ni como, podría haber certificado, con toda
legalidad.
Una vez inaugurado, el polideportivo era cómodo y cumplía
perfectamente para practicar ciertos deportes en él, pero no
todo era de color de rosa, puesto que con la piscina hubo
más de “un atasco”, aunque siempre se pudo solucionar.
¿Y ahora qué?. Ahora ya se ha inaugurado otra instalación
deportiva, de lujo en cuanto al coste, luego, en cuanto a su
utilidad, ya veremos, cuando pasen un par de años, por
ejemplo.
Las fotos, en la inauguración, y el politiqueo barato, hasta
dar nombre a las nuevas instalaciones, han sido de todos los
gustos, pero como ya está en funcionamiento, ahora parece
que ya se está olvidando que hay otra instalación que se van
a dejar arruinar, si no la cuidan como se debiera cuidar.
Varios usuarios del gimnasio del Polideportivo Díaz-Flor se
han quejado, incluso han denunciado los problemas que hay,
problemas traducidos en deficiencias para su uso correcto.
La situación está llegando a tal grado que se solicita que
el ICD debe intervenir, para poder solucionar las
deficiencias existentes.
Nos han comentado que esas quejas han sido formuladas, no de
palabra, sino por escrito pero, en principio, no se ha
hecho, todavía, nada para que las instalaciones queden como
es debido a la hora de practicar deporte en ellas.
Llegados a esta situación, y no me gustaría decirlo muchas
veces más, hay que recordar a muchas personas que,
frecuentemente, nos dicen que no tenemos instalaciones como
hay en otras partes, yo lo que suelo decir, en estos casos,
es que, aquí sí se han gastado “buenos dineros” para que las
haya, pero que lo que no puede ser es que de los tres
polideportivos cubiertos, sólo haya uno que se esté
utilizando, a pleno rendimiento, mientras que los otros dos,
por un motivo o por otro, están infrautilizados, con lo que
tendremos que decir que “aquí se tira el dinero”, a la hora
de construir, o se tira el dinero con ciertas personas que
tendrían que velar por esas instalaciones, y es que muchos
de ellos aparecen por allí “a comerse la sopa boba”,
mientras que hay personas competentes que no tienen donde
poder trabajar.
Lo más curioso de todo esto es que los propios afectados por
las incomodidades y deficientes servicios, dicen que ellos
siguen pagando la tasa mensual establecida para recibir unos
servicios, a tono con su modalidad deportiva, pero que esos
servicios no los están recibiendo, con lo que ponen en el
punto de mira al mismísimo ICD al no haberles prestado,
todavía, alguna de esas atenciones.
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