Parece que es la idea que baraja
el grupo político Caballas, como primer servicio a los
ceutíes.
A priori, no hay por qué descartarlo, ya que nada es
descartable, sí es positivo, salvo que en esa idea de
municipalizar el servicio vaya la idea de que tal servicio
fuera gratis.
El momento por el que pasan los autobuses, mejor dicho la
empresa de autobuses, no es el más apropiado para meter más
gastos y más problemas al Ayuntamiento, que con esto iba a
tener más empleados, en su ya numerosa plantilla, a los que
pagar y dudo de que tuviera ingresos suficientes para hacer
frente, desde cero, a lo que supone comenzar con un servicio
de este calado.
Sí es interesante, positivo y beneficioso, para todos los
ceutíes, incluso para quienes no viajamos mucho en autobús,
que ese servicio esté bien atendido y yo creo que lo está
aceptablemente en las líneas que se puede estar bien
atendido, mientras que en la que lleva, en eso y en otras
cosas, problemas añadidos, ahí el servicio ya es bastante
con que subsista, porque más garantías, estoy convencido, la
empresa, por sí sola, sería muy difícil que pudiera darlas.
Y es bueno, eso no se lo voy a negar al grupo Caballas, que
se tome en serio un Ayuntamiento la problemática de lo que
es tener que viajar, en Ceuta, en el autobús en alguna de
las líneas, pero lo que no creo que sea bueno y, desde
luego, nada positivo es que el Ayuntamiento quiera hacer
tabla rasa con una empresa que tiene docenas de empleados,
para que luego un cacique cualquiera, incluso el propio
Aróstegui, vaya colocando a dedo a sus amigotes y así
cubrir, cualquiera sabe como, los puestos de trabajo que
ahora están bien cubiertos.
El Ayuntamiento tiene que solucionar problemas, no comenzar
a crearlos, desde antes de ocupar cualquiera un escaño en la
Asamblea, por lo que esa renovación, costosa, por otra
parte, es la punta del iceberg de las perogrulladas que
Aróstegui empezaría a hacer si un día se sienta, con poder,
en la Asamblea de Ceuta. Mejor que se quede donde está.
El planteamiento de que el servicio iba a tener mejores
vehículos es otra demagogia que hoy no nos vale, por cuanto
la flota de autobuses que ahora mismo recorren las
diferentes líneas de Ceuta son aceptables, muchos de ellos
nuevos y cada vez mejor adaptados a las exigencias actuales.
Mejorable puede ser todo, incluso la candidatura en la que
vaya Aróstegui, pero hacer experimentos con cualquier cosa,
hoy por hoy, no nos parece lo más conveniente.
Sí será mejorar el servicio que, ante los problemas de
alguno de los recorridos, la propia Policía Local,
dependiente del Ayuntamiento, si es que no otra policía,
protegiera y defendiera de los ataques y las gamberradas que
los autobuses y sus empleados están sufriendo a cada
instante. Todo lo demás son castillos de naipes que no
atraen la atención de nadie y que se hace para dejarse oír,
como si fueran el eco de una buena propuesta.
Aquí, en esto, está el eco, mientras que el sonido original
está en mejorar lo mejorable, no en inventar algo que nadie
está pidiendo.
Sin viajar, a diario, que no viajo, el servicio de
autobuses, en Ceuta, es, cuando menos, aceptable, mejorable
podrá ser, pero para eso está una empresa solvente, no
cualquier “chiquilicuatre” que con promesas falsas quiere
medrar ante el electorado.
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