Prestell cerrará hoy, después de prácticamente tres meses en
las Murallas Reales, las puertas de su mágico laboratorio al
público ceutí, donde ha compartido con este sus secretos,
dejando entrar a los ceutíes en su universo de colores y
formas, de texturas y símbolos, de profundiades y figuras.
El artista madrileño inauguraba el pasado día 20 de octubre
en el Museo de las Murallas Reales su obra ‘Territorios del
Alma’.
La visita a la exposición de Prestell ha aportado a todos
los que la han visitado serenidad, una calma cimentada en la
belleza de sus obras, en lo personal de su concepción, y ha
conseguido transportar al visitante a otros lugares, a otros
tiempos, mediante la contemplación de sus símbolos, la
comprensión de sus motivos, la asunción de su filosofía.
Cada vez que Prestell lleva al Museo de las Murallas Reales
su obra, lo llena de pensamientos, de sentidos, de
intención. Traza pinceladas de cultura con mayúsculas. Con
esa paleta tan trabajada, con ese regusto tan suyo, con ese
barroquismo orientalizante inconfundible.
En esta, como en otras ocasiones, en la exposición
‘Territorios del alma’ ha estado presente la astronomía, la
música, la ciencia, representada como motivo, como pretexto,
como referencia a lo misterioso, a lo desconocido o, por qué
no, a todo lo contrario, al conocimiento pleno, adquirido a
través de la iniciación y el secreto. En el tubo de ensayo
de sus bebedizos se unen siempre un mucho de realidad, con
una pizca de sentimiento, dos medidas de corazón y otras dos
de sabiduría. El resultado es una fórmula magistral que
gusta a todos los sentidos sin excepción, tal y como así lo
han podido corroborar los cientos de personas que han
visitado esta muestra.
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