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Los diez primeros días del año se han saldado con 17
detenciones por tráfico de drogas y 40 actas por posesión o
consumo, lo que se traduce en un incremento del 166% en los
arrestos y un 66,66% en el caso de las infracciones. Este
ascenso podría estar motivado por la crisis económica o, por
lo menos, eso interpretan los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad
del Estado en la ciudad autónoma.
Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado han efectuado
un total de 18 detenciones por tráfico de drogas y 40 actas
de infracción por posesión o consumo en los diez primeros
días del año.
Datos que suponen, con respecto al mismo periodo del
ejercicio anterior, un incremento del 166% de los arrestos y
un 66,66% en el caso de las sanciones. Cifras nada positivas
teniendo en cuenta que se trata de tráfico ilegal con un
ascenso que puede estar ligado a la “precaria situación
económica por la que atraviesan muchas familias que buscan
una salida en este ilícito comercio”, señalaron desde la
Jefatura Superior de Policías y la dirección general de la
Guardia Civil.
Los efectivos adscritos a la Brigada de Seguridad Ciudadana
han procedido a la detención de 8 personas por tráfico en
este corto periodo, la mayoría de ellos, de nacionalidad
española y residentes en la península, los cuales utilizaron
el procedimiento de adosar al cuerpo las pastillas. Además,
levantaron 40 actas por posesión o consumo de drogas en
aplicación a la Ley 1/92. Como consecuencia de esta
actividad, se han intervenido 7.902 gramos de hachís.
Por su parte, los funcionarios afectos a la Comisaría del
puerto han detenido en dicho periodo a diez personas por
tráfico de estupefacientes, siendo de nacionalidades
dispares, tales como rumanos, nigerianos, marroquíes y un
español. El procedimiento de ocultación en todos los casos
es el denominado en el argot policial como ‘culeros’.
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