Decir el nombre de Patxi Andión es hablar de una época
apasionante de la historia española, una etapa de sueños, de
esperanzas... y de libertades. Una etapa que ya forma parte
de nuestro pasado pero que nos ha hecho ser quienes somos.
Pero también es hablar de un excelente compositor que, a
pesar de haber de estado 12 años alejado del panorama
musical, sigue sabiendo conmover al público con letras que
pueden surgir del más mínimo gesto. Su disco ‘Porvenir’ es
buena prueba de ello, un excelente trabajo discográfico
donde sigue presente la esencia del cantautor que fue y en
quien se ha convertido. Como en nombre del disco, su
porvenir está lleno de grandes metas. Ya tiene el equipaje y
está en el camino correcto.
Pregunta.- ¿Es el primer concierto que ofrece en Ceuta?
Respuesta.- No, pero la verdad hace tanto tiempo que es
probable que ni la gente se acuerde, fue en los años 70.
P.- Han pasado 12 años desde su último disco, ¿considera
que era el momento de enseñar sus canciones?
R.-Esa es la realidad, en todo este tiempo yo he estado
investigando y componiendo, probando cosas pero sin
intención de enseñarlo. Llegó un momento en que me junté con
30 canciones y la discográfica me insistió en que era el
momento de volver a sacar un disco. Son 10 canciones que
forman un poco la selección de esa última tanda de trabajo.
P.- ¿A qué se ha dedicado durante el tiempo que ha
permanecido alejado de la música?
R.- A nivel cotidiano me he dedicado a la cátedra en la
Universidad que es el trabajo que me da de comer. Sin
embargo, no he dejado de trabajar en la música cada día como
en toda mi vida. He recuperado cosas que había dejado de
lado y todo eso necesitaba de un fuerte trabajo de
documentación, de investigación, de volver a plantearse
muchas cosas que parecían instauradas y que tenían que ser
cuestionadas. Ha sido un trabajo duro pero muy interesante.
P.- ¿Ha sentido un poco de vértigo al volver?
R.- El miedo siempre está ahí y en esta ocasión la distancia
era muy grande, no tenía mucha conciencia de qué podía
pasar, cómo se podía entender mi vuelta. Volver a grabar lo
mismo de siempre no me parecía interesante, ya que nunca he
sido una persona convencional y desde luego como cantautor
tampoco lo he sido. Soy consecuente y si lo que quería hacer
ya estaba hecho, bien por mí o por cualquier otro cantante,
he preferido no hacerlo. No estoy aquí para hacer negocio
sino para trabajar en la música y he estado muy atento para
no repetir. Sin embargo, tampoco te puedes alejar de lo que
eres, y cantas y compones como tú eres.
P.- ¿Por qué eligió ese título?
R.- Por dos razones aunque, en realidad, los títulos se
ponen ellos mismos. Por un lado era como una apuesta por el
futuro y no de mirada nostálgica hacia atrás, y además,
siempre tengo la sensación de que lo mejor está en lo que
todavía no he hecho. Me tiene que asaltar y acompañar para
hacer una canción distinta, que aporte cosas más
excepcionales. Ese título se inspira en esas dos vertientes.
P.- Se inspira en cosas cotidianas...
R.- Más que una inspiración, es una conmoción. Realmente no
voy buscando nada, hay personas que sí la buscan y se
preocupan si no la encuentran, a mí de pronto algo me
conmueve y hasta tal punto que me obliga a sentarme y a
pensar sobre ello. A veces son cosas grandes y otras no,
como a todo el mundo. Puede conmover un gran gesto o una
simple mirada, cualquier cosa...
P.- ¿Cómo ha encontrado el panorama musical?
R.- En lo que afecta a la canción de autor está algo mejor
porque no hay tantos prejuicios como en los 90. En los
mercados, sí está muy mal, el 85% del negocio es piratería y
viendo eso es imposible que la industria vaya bien.
P.- Pero ¿usted se ha sentido respaldado en su vuelta?
R.- Exageradamente respaldado, tanto desde el público como
la crítica. Han sido espectaculares y la atención prestada
ha superado mis expectativas.
P.- Hay un detalle que llama la atención en su biografía:
cuando tocaba con diferentes grupos en sus primeros años, no
le dejaban cantar...
R.- Sí, es cierto (risas). Eran épocas en la que la moda
eran las voces blancas y mi voz tan rota no funcionaba. La
primera vez que canté en público fue una canción de Ray
Charles, ‘I can´t stop loving you’ y porque me la pidieron.
Posteriormente, comenzaron a aparecer voces negras y mi voz
tuvo más cabida.
P.- Sin embargo, dijo también que llegó un momento en que
los cantautores ya no tenían cabida...
R.- En la transición se renunció a muchas cosas en aras de
la tranquilidad. La gente que creíamos que el creador debía
mantener a salvo su ideología tuvimos menos que hacer y ahí
hablo de Paco Ibáñez, Aute o yo mismo. Surgió un autor más
acomodaticio.
P.- ¿Se imaginaba una España como la que hay en la
actualidad?
R.- Yo luché por una diferente aunque es probable que
hubiera terminado desembocando en esta. Sin embargo, sigo
siendo republicano, el Rey lo sabe y lo comentamos, al
margen del respeto que me inspira la Familia Real y de la
buena relación que tengo con algunos de sus miembros. Si se
hubiera ido por otro camino, quizás España tendría más
fundamento del que tiene.
|