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Y los objetivos con los que comenzó el campeonato liguero
siguen intactos, de hecho y de derecho, por cuanto se está
entre los cuatro con derecho a buscar una de las cuatro
plazas que permiten jugarse el ascenso, además de que no se
renuncia a nada de lo que se prometió desde el primer día,
cuando se hizo con la dirección de la entidad el actual
presidente, José Antonio Muñoz.
La primera vuelta
Se partió con toda la ilusión del mundo y ya en el primero
de los encuentros, fuera de casa, se lograba el primero de
los puntos, en un campo en el que no se pierde nunca, pero
cuesta trabajo ganar, cada año.
En casa no se empezó bien y se perdió frente al Lucena, que,
contra pronóstico, se llevó los tres puntos de Alfonso
Murube. Con todo, poco a poco, se fue logrando un sitio
entre los cuatro primeros, y aunque la marcha ha sido
irregular, ahí está el equipo caballa, que perdió donde
menos se esperaba, pero que ante los de arriba supo sacar
buenos resultados.
Y no olvidemos que, por una razón o por otra, el equipo es
totalmente nuevo y ha habido que acoplar más de una pieza,
desde el primer día.
La eliminatoria ante el Barcelona
Económicamente, puede haber significado el no tener muchos
más agobios, pero en cuanto al rendimiento de muchos
jugadores, eso hizo que tantos encuentros machacaran a más
de uno, que luego no se ha recuperado. Con todo, la afición
disfrutó de una eliminatoria ante uno de los grandes de
verdad y eso, aunque haya quien esté buscando las cuatro
patas al gato, no se les olvida a los aficionados, que
llevaban diez años, sin algo parecido.
El asunto de las deudas
En principio, el Ceuta no se ha librado de ser uno de los
focos de atención, por la cuestión de deudas a ex jugadores,
al no haber cobrado al final de la temporada pasada todo lo
que tenían en contrato.
Con todo, para que nadie se llame a engaño, no ha sido este
medio el que ha sacado el asunto a la calle, para tirar
barro a la directiva anterior que fue la que no dejó pagado
todo aquello.
La directiva actual se hizo cargo del Ceuta, sabiendo lo que
había, y a medida que ha ido teniendo liquidez ha ido
pagando lo atrasado.
En este momento, el Ceuta tendrá que abonar 61.428,78€,
cantidad que han reclamado seis ex-jugadores: Sandro
Marques, Aarón Bueno, Raúl Aguilar, Aitor, Ramón y De Lerma.
Hay solvencia económica
En el comunicado de la AD Ceuta en nuestra edición de ayer,
quedaba claro lo que he comentado anteriormente: “Cuando
José Antonio Muñoz accedió el pasado mes de junio a la
presidencia de la AD Ceuta, asumió con total normalidad la
deuda con jugadores de la temporada anterior (2009-2010),
que ascendía a más de 230.000€”.
La cuestión queda clara y claro debe haber quedado el gesto
de quien ahora dirige el club, especialmente para aquellos
que desde las sombras, con la cobardía de no ser capaces de
dar la cara, siguen actuando. Está claro que el presidente
actual sabía lo que había y se hacía cargo de ello, con lo
que los jugadores que reclaman lo suyo, lo van a cobrar
religiosamente, como es natural.
Y ahora otras metas
Naturalmente, hay que saber valorar todo lo que hay, y eso
que hay tiene tintes positivos, aunque no haya habido un
rendimiento como se esperó, desde las primeras jornadas del
campeonato.
El Ceuta, como le ocurre al Madrid, en su categoría, no
puede hacer programación para dos o tres temporadas vista,
aquí se ha comenzado con la idea del ascenso, o por lo menos
de disputarlo al final de temporada, y eso es lo que cuenta.
Pero no debemos olvidar que en esta lucha, y este año,
precisamente, hay dos de los equipos clásicos con andadura
en la primera división y muchos años en la segunda, que no
van a dejarse pisar el terreno.
El Cádiz, a pesar de ello, anda ahí, a vueltas con
resultados muy buenos y con otros que son de auténtico
fracaso, con lo que sólo el Murcia, al que se ganó aquí,
parece el gallito de verdad.
Vendrán refuerzos
Obviamente, no vamos a dar los nombres de aquellos posibles,
para las próximas jornadas, porque dar los nombres nosotros
sería estar jugando con ventaja sobre otros medios, además
de que dar un nombre haría que el jugador fuera tocado por
otros equipos, encareciendo el precio.
Aquí, que quede claro, directamente la parte interesada,
especialmente el presidente, que conoce el mercado, es el
que sabe donde hay, sabe lo que quiere y sabe como poderlo
fichar, con lo que en el primer partido en casa, tras éste
del Écija, con toda seguridad, habrá un par de refuerzos de
los de verdad, para acometer ese reto y llegar a lo más
alto, al final de la competición.
Más apoyo que nunca
Es lo que está haciendo falta y va a hacer, porque ya se ha
visto el talante de parte de los adversarios, para con el
Ceuta.
Las palabras del técnico del San Roque de Lepe dicen, por sí
solas, el cariño y el aprecio que hay por el Ceuta en
ciertos campos de esos recién ascendidos a la categoría.
Y si, en el último partido de liga, el Ceuta se juega algo
en Lepe, se lo jugará en el terreno de juego, no en otra
parte, pero lo que sí ha quedado claro es que si el técnico
Sergio Lobera, en alguna ocasión, estuviera sin equipo, en
el Ceuta no iba a encontrar trabajo.
Uno no se explica como ciertos profesionales son tan
estúpidos como para cerrarse, ellos solos, unas puertas por
las que podrían cruzar en algún momento futuro.
Ahora, con palabras, más o menos acertadas, de un entrenador
ajeno a los intereses del Ceuta, lo que importa es que haya
equipo solvente, que lo va a haber, y que en mayo no haya
que quedarse esperando la próxima temporada, sin haber
jugado esa fase de ascenso que estamos esperando.
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OPINIÓN
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EL ANÁLISIS
