El cepemista Mustafa Aberchán aseguró ayer haber sido
tratado por “algunos agentes” de la Guardia Civil “como si
fuera un delincuente”, después de que, al parecer, haciendo
uso de unos “instrumentos de última generación”, utilizó a
“ciertas personas confidentes” para grabarle una
conversación en la que, entre otros, se le pidió que dijera
cuáles son los planos de su casa.
“No vamos a consentir este trato”, subrayó Aberchán en su
comparecencia ante los medios de comunicación, que aseguró
que en Melilla hay “ciertos agentes” del Instituto Armado
“que se creen con el derecho de actuar así” y, quizá,
“amparados por alguna autoridad judicial”.
“El agente de la Guardia Civil es una autoridad, pero el
diputado de la Asamblea es otra autoridad, una autoridad
popular que emana de las urnas”, espetó el líder de la
oposición en Melilla, que señaló que todos los ciudadanos
españoles son iguales cuando “hay que cobrar ante un
presunto delito” pero, no obstante, todos tienen el derecho
“de recibir el trato que ampara la Constitución Española,
que no es el que están haciendo a los diputados de la
Asamblea de la Ciudad”.
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