La semana pasada, el Ejecutivo
local facilitó a los diferentes grupos parlamentarios con
representación en la Asamblea, el informe final de la
inspección realizada por el Tribunal de Cuentas en relación
a la gestión de los distintos servicios pertenecientes a la
Administración Autonómica durante los años 2002, 2003 y
2004. Me permito recordar a los lectores de este periódico,
que dicha fiscalización se llevo a cabo como consecuencia
directa del acuerdo alcanzado por todas las fuerzas
políticas con representación parlamentaria en aquellos
momentos, incluido el Partido Popular, grupo mayoritario en
la Asamblea y principal valedor de dicha aprobación por
tanto, es más que evidente el afirmar que nos encontramos
ante una nueva demostración de la transparencia en la
gestión política del Presidente de todos los ceutíes, Juan
Jesús Vivas.
Tras las duras críticas vertidas por las formaciones
políticas en la oposición debo puntualizar , en primer
lugar, que el Tribunal de Cuentas eleva una serie de
recomendaciones al Ejecutivo local con la única intención de
mejorar los diferentes procedimientos administrativos que se
realizaban en los años inspeccionados por tanto, en ningún
momento dicho informe atribuye responsabilidades penales a
quienes ostentaban la dirección política en las diferentes
áreas y organismos inspeccionados es decir, no existe duda
alguna en relación a la inexistencia de operaciones
fraudulentas cometidas en dichos años a pesar, de las
diferentes acusaciones formuladas por las formaciones
políticas en la oposición y especialmente, desde la
coalición Caballas en la que, cada vez más, resaltan las
estrategias “marrulleras” utilizadas tradicionalmente por
quien dirige ideológicamente las labores de acoso y derribo
contra el Presidente de la Ciudad.
En segundo lugar, destacar que este informe contiene
recomendaciones que han sido acometidas casi en su totalidad
como consecuencia directa del compromiso del Gobierno
presidido por Juan Jesús Vivas en la mejora de los
procedimientos administrativos y de los mecanismos de
control de los mismos. De hecho, el propio Tribunal de
Cuentas informa sobre las mejoras introducidas en dichos
procedimientos en relación al periodo comprendido entre 1991
y 2001. La Ciudad Autónoma de Ceuta cuenta desde el 14 de
enero de 2005 de un riguroso reglamento de subvenciones
públicas, en el mismo año se puso en marcha un proceso de
regulación del inventario municipal así como, se
introdujeron importantes mejoras en los mecanismos de
control de los servicios de intervención y tesorería sobre
los diferentes procedimientos administrativos que se
realizan habitualmente.
Por tanto, resulta más que evidente, que las duras
acusaciones vertidas en los últimos días por las formaciones
políticas en la oposición responden exclusivamente a razones
partidistas totalmente alejadas del interés general que
debería primar en sus labores políticas. La cercanía de los
comicios autonómicos a celebrar el próximo mes de mayo, la
ausencia total de programas electorales serios, creíbles y
aplicables así como, la escasa credibilidad de los
principales líderes políticos en la oposición provoca, que
estos dediquen todos sus esfuerzos a desgastar al Gobierno
local a través, exclusivamente, de acusaciones, insultos y
calumnias. En definitiva, la crispación en la política
ceutí, protagonizada en los últimos meses por los dirigentes
de la coalición Caballas, regresa a la actualidad ceutí,
exterminando contundentemente la concordia existente en los
últimos años. No obstante, los ciudadanos debemos ser
conscientes del incremento en los próximos meses de estas
estrategias de nuestro pasado más rancio.
|