La larga madrugada de Año Nuevo se sustanció con dos
marroquíes detenidos y varios robos con violencia e
intimidación producidos en distintos puntos del centro de la
ciudad.
Los ladrones, marroquíes, se apostaban a las salidas de los
lugares de celebración y atacaban a víctimas fáciles. En
este caso jovenes muchachas de poco más de 18 años.
A una de ellas la golpearon en la cabeza, en las puertas de
la Iglesia de Africa para robarle el móvil. A otra de ellas,
en la Marina Española fue forzada con violencia para el robo
de la cartera.
Este último atracador fue detenido y presentado en la
Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía por agentes de la
Policía Local.
La afluencia de marroquíes jóvenes, en la pasada madrugada,
fue notoria en la zona centro de la ciudad en horas donde
-se supone- los marroquíes -dos de ellos detenidos-
aguardaban para la búsqueda de víctimas propicias para el
robo fácil.
La Policía trata de identificar a otros malhechores.
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