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La Consejería de Sanidad y Consumo, mediante el Plan sobre
Drogas, comenzó a principios de esta semana un programa de
prevención y tratamiento de la ludopatía. Este programa da
una respuesta terapéutica al principal trastorno adictivo no
producido por drogas. El tratamiento consiste en una
evaluación de cada caso para que el equipo del programa
hagan un diagnóstico, y poder elegir el tratamiento más
adecuado. Suele ser, psicológico y farmacológico, o
únicamente psicológico. Esta patología es muy extendida y el
rango de edad en el que se enmarcan los jugadores se
encuentra entre los 18 y los 45 años.
La Consejería de Sanidad y Consumo, mediante el Plan sobre
Drogas, comenzó a principios de esta semana un programa de
prevención y tratamiento de la ludopatía. Este programa da
una respuesta terapéutica al principal trastorno adictivo no
producido por drogas.
La ludopatía, según distintos estudios, tiene una tasa de
prevalencia en España que oscila entre el 2% y el 3% de la
población adulta. En números absolutos e incluidos los
afectados de forma indirecta, como familiares, amigos y
compañeros de trabajo, afecta a más de tres millones de
personas.
El programa que pone en marcha la Ciudad “tiene la finalidad
de ayudar a las personas que demandan este tipo de
asistencia, porque la hay y mucha”, explicaba Isabel Román,
psicóloga del plan sobre drogas. “Hasta ahora a este tipo de
pacientes con este trastorno los derivábamos a la península,
pero ahora podemos tratarlo desde aquí”.
El programa está ahora mismo en los comienzos, y como
comentaba Román “tiene que ir perfeccionándose para poder
llegar a más personas y atenderles con mayor precisión”.
En un principio, en el centro de drogodependencia que es
donde se está llevando a cabo, “hacemos una evaluación de la
persona con problemas de juego, de su entorno familiar y
social para, hecho esto, desarrollar un programa
personalizado que incluye, además de la evaluación y el
diagnóstico, el tratamiento y el seguimiento”, describe la
psicóloga del programa.
Esta terapia se hace manera individual y grupal. En este
último caso, hay veces que también se invitan a los
familiares, porque es un apoyo importante para la persona
que sufre el problema, y de esta manera se consiguen más
objetivos que de manera individual.
El programa de prevención de la ludopatía proporcionará
“apoyo psicológico, médico y social al jugador y al
familiar”. Además, enseñará al paciente estrategias y
habilidades para que sepa afrontar las situaciones de
riesgo”.
Existen distintas estrategias, como ir con el paciente a
locales donde hayan máquinas tragaperras y pasar un tiempo
allí, “pero estas suelen ser difíciles y no ayudan a la
recuperación del que lo sufre, sí en momentos más avanzados
del tratamiento, pero desde el principio no le beneficia”.
El tratamiento
Después de hacer la valoración, de evaluar el caso y
diagnosticar la patología entre el equipo que compone este
programa, que está formado por un psicólogo, un trabajador
social y un médico de atención farmacológica, explica Isabel
Román que, se propone, según la persona, un tratamiento que
puede ser tanto farmacológico y psicológico, o únicamente
psicológico. “Un trato único con fármacos no es
recomendable, además de que son trastornos psicológicos los
que sufren estas personas, por lo que no tendría sentido un
medicamento únicamente”.
La ludopatía es un problema que sufre tanto hombre como
mujeres, existe una demanda importante, “pero son más hombre
que mujeres los que acuden a nuestras instalaciones, es un
problema que socialmente está muy mal visto, sobre todo en
el género femenino, y eso hace que sean menos las que
reconozcan su problema”, comentaba Román.
El trastorno
La ludopatía, ludomanía o juego patológico es un problema
socio-sanitario que se ha incrementado en la última década.
Según informan desde el Plan sobre Drogas, “el trastorno es
mucho más frecuente en hombres que en mujeres, pero ellas
son más reacias a buscar ayuda terapéutica por la censura
social”.
La edad de acceso al juego ha descendido en los últimos años
y cada vez son más los adolescentes que buscan tratamiento
por problemas de juego. El rango de edad en el que se
enmarcan los jugadores patológicos se encuentra entre los 18
y los 45 años.
El jugador patológico se caracteriza por una dependencia
emocional del juego, una pérdida de control y una
interferencia negativa en el funcionamiento normal en la
vida cotidiana.
Los interesados pueden dirigirse al centro de atención a las
Drogodependencias, que está en el número 4 de la calle Juan
de Juanes, o solicitar información en el teléfono 956 50 33
59.
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