Uno de los dos Hércules que desde hacía un lustro adornaban
la bocana del puerto está ya en su nueva ubicación, la plaza
de la Constitución. El delicado traslado se llevó a cabo a
partir de las 22.00 horas desde el Muelle de Levante y en un
camión especial a través de La Marina. La delicada maniobra
se desarrolló en medio de una fuerte tormenta y de hecho el
mal tiempo ha dificultado estos días la labor, aunque según
el consejero de Fomento, se han cumplido los plazos
previstos.
La estatua de Hércules del Muelle de Levante descansa desde
anoche en su nueva ubicación, la céntrica plaza de la
Constitución. La delicada maniobra de traslado de esta
monumental figura de bronce, de ocho toneladas y siete
metros de altura, se desarrolló en medio de una intensa
tormenta.
Unas horas antes de lo inicialmente previsto, hacia las
21.00 horas, la estatua esperaba ya en el arranque del
muelle, junto a la gasolinera, su viaje por los bajos de La
Marina. La Policía Local desplegó una hora después un
dispositivo especial de tráfico para facilitar el transporte
de la colosal figura del héroe mitológico, obra del escultor
ceutí Ginés Serrán Pagán.
Tal como adelantó el pasado lunes EL PUEBLO y confirmó ayer
el consejero de Fomento, Juan Manuel Doncel, el mal tiempo
ha ralentizado las labores de retirada y preparación de la
estatua para que pudiera desplazarse. No obstante, se han
cumplido los plazos inicialmente previstos, puesto que tal
como se estableció por el Consejo de Gobierno, el traslado
debía estar completado “para Navidad”.
Los trabajos para el cambio de ubicación de la estatua han
sido dirigidos por dos técnicos de la GIUCE, un ingeniero y
un arquitecto, y ejecutados por la empresa Dragados con un
coste que ronda los 18.000 euros. Los expertos consideraron
más aconsejable trasladar el Hércules de pie, en lugar de
tumbarlo, para evitar, según explica Doncel, que se dañara.
Por ello ha sido necesario construir una estructura metálica
con la que se ha protegido la obra.
Respecto al ‘gemelo’ de este Hércules, ubicado en el Muelle
de Poniente, Doncel indica que aún no se ha decidido dónde
se colocaría en caso de que lo autorizara su autor, que lo
donó a la Ciudad. Una de las posibilidades barajadas por el
Ejecutivo es que se instale en el Parque Periurbano de Santa
Catalina, en construcción y que será el de mayor superficie
de la ciudad.
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