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El vial que la Sociedad Estatal de
Suelo (Sepes) construye en la segunda fase de urbanización
de Loma Colmenar estará terminado “en primavera o incluso
antes”. En cuanto al estado en el que se encuentran los
aledaños de las naves comerciales allí instaladas, con una
franja que las rodea sin urbanizar, los responsables de
Sepes aseguran que podría arreglarse aprovechando esta
actuación, pero que estas obras habrían de correr por cuenta
de los empresarios propietarios de los almacenes.
Los primeros trabajos de la segunda fase de urbanización de
Loma Colmenar van al ritmo previsto y las obras de las
calles aledañas a las naves comerciales allí instaladas
“estarán completamente terminadas en primavera o incluso
antes”. Esta es la respuesta que la entidad promotora, la
Sociedad Estatal de Suelo (SEPES), dependiente del
Ministerio de Fomento, ofrece a los propietarios de estos
almacenes, que se quejaban tanto del mal estado del entorno
durante las obras como de la falta de urbanización de los
aledaños.
En cuanto a la cuestión de los accesos a las naves, los
portavoces de Sepes señalan que “un entorno en obras es
incómodo”, pero “precisamente por eso” la dirección de obra
está “continuamente pendiente de mantener la zona lo más
limpia posible a través del contacto permanente con la
empresa adjudicataria, que es la responsable de estas
tareas”.
Han atendido quejas
De hecho Sepes afirma que le consta que la adjudicataria “ya
ha solventado algunas de las quejas que les habían
transmitido los empresarios, bien a través de EL PUEBLO o
bien directamente a través de los responsables de la obra”.
Además agrega que “en todo momento de la obra se han
mantenido las condiciones de acceso existentes inicialmente
a los negocios”, por lo que a su modo de ver “ningún acceso
se ha visto perjudicado por las obras, que están en la
situación en la que se encontraban antes de las obras”.
En esta línea, sobre la solicitud para que Sepes acondicione
“el interior de los espacios y parcelas particulares
utilizadas por dichos negocios”, la entidad subraya que las
obras se han desarrollado en todo momento sobre el espacio
contemplado en el proyecto aprobado por la Ciudad Autónoma y
licitado por Sepes”. No obstante, “si algún empresario desea
que la actuación vaya más allá y se acondicione parte de la
parcela de su propiedad, Sepes está abierta a estudiarlo con
los solicitantes”, afirma.
Dispuestos a colaborar
Para los responsables de la entidad pública esta solución no
sería “complicada”, ya que “sólo es necesario hacer un
pequeño proyecto sobre cada caso particular”. A pesar de
ello, y como quiera que se trata de “unos trabajos no
contemplados en el proyecto actual, y a desarrollar sobre
una propiedad privada, el coste de la ejecución de las obras
corresponde a los empresarios que lo soliciten”.
En definitiva, la empresa pública de suelo se muestra
“abierta a colaborar aprovechando que están allí las
máquinas, los técnicos, etcétera”, aunque insiste en que “en
todo caso debe de ser por iniciativa y a cuenta de los
empresarios”.
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Los empresarios solicitan que se acondicione el entorno de
sus naves
Los empresarios que tienen sus
negocios en el arroyo de las Colmenas, por el que discurre
el vial de Sepes, solicitaron a través de las páginas de
este diario que las obras se aprovechen para acondicionar el
entorno de sus naves. Y es que los almacenes han quedado
separados de una de las aceras que flanquean la carretera
por una franja de tierra sin urbanizar. Aunque en un futuro,
a medida que avancen las obras de la segunda fase de
urbanización de esta zona, que han comenzado con esta
actuación, en la misma se instalará un nuevo polígono
industrial, los afectados piden una solución provisional.
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