Sigue lloviendo, “agua de Dios” me
comentan al venderme unas dulces mandarinas en el mercado de
la república independiente de Hadú, castizo barrio que goza
de todas mis simpatías y que va cada vez más a su bola. Y yo
lamentando aun haberme perdido la magistral conferencia
sobre la cultura española en el Tetuán de los años
sesenta... Vaya.
Pero hoy quería llamar su atención sobre la segunda revista
en español editada desde el vecino país. A diferencia de
“Marruecos Siglo XXI” (¿les suena el nombre?) generosamente
editada sin publicidad, el nuevo medio mensual “Kántara”
(del grupo Massae) cuenta con un buen e interesante soporte
publicitario. Hay opiniones y, en sucesivos números, ya
veremos. Antonio Gómez, director de El Pueblo, lo ve como
una loable iniciativa y está el hombre encantado con el
perfil de “Kántara” y algunos de sus colaboradores, los
periodistas españoles (alguno muy amigo suyo) que allí
escriben con “otra mirada” que a ver como se va perfilando,
pues les va a ser difícil guardar un deseable equilibrio y,
sutilmente como puede leerse en el primer número, esa “otra
mirada” nace ya escorada.
Y es que no se trata solo según escribe Rachid Niny en el
editorial de informar sobre Marruecos “sin hostilidad”, como
estaría haciendo la prensa española. Yo mismo he escrito en
innumerables ocasiones con notable simpatía hacia Marruecos,
sus gentes... pero cuando se amenaza a mi país tengo muy
claro que mis colores son el rojo y gualda. Leyendo
“Kántara” con atención, ya me gustaría a mí que todos los
periodistas españoles que figuran en mancheta lo tuvieron
igual de claro, porque hay al menos uno (para el resto mi
sincero respeto) que lo cuestiono abiertamente y de
frente... por lo que escribe y por lo que hace. Porque quien
es capaz de vender sus raíces por el placer del tálamo y
pasarse al islam a la marroquí para acabar siendo un vulgar
“converso de la raja” (como despectivamente llaman los
musulmanes a éstos) es, a mi juicio, capaz de vender a su
madre. Volviendo a “Kántara” (Puente) yo invito a su
redactor jefe y al resto de firmas españolas a escribir con
equilibrio tanto del Sáhara como de Ceuta y Melilla. A ver
si “Otra mirada es posible” porque, siempre, quien paga la
orquesta toca la música. Y en “·Kántara” es obvio que la
línea editorial dominante va a ser la marroquí y sus
estratégicos intereses, tanto en las “Provincias del Sur”
como en la OPA lanzada sobre Ceuta y Melilla... o con
Argelia. Nada de presuntos “puentes”. Me temo que sea ésta
otra ocasión perdida. Visto.
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