La titular del Juzgado de lo Penal númer 1 ha dictado
sentencia absolutoria a favor de un joven al que la
Fiscalçia imputaba un delito de robo con fuerza en un
perfumería de la Almadraba a través del método del butrón.
La jueza considera que la versión del acusado no era
contradictoria mientras que la testigo de referencia no se
identificó para el juicio.
”No hay pruebas suficientes para acreditar su culpabilidad”.
Por este y otros motivos, la titular del Juzgado de lo Penal
número 1 ha dictado sentencia absolutoria a favor de un
joven al que el Ministerio Fiscal imputaba un delito de robo
con fuerza, concretamente, en una perfumería de la Almadraba
a través del método del butrón.
La magistrada ha considerado que la versión aportada por el
acusado desde su declaración en la Comisaría hasta el juicio
había sido firme sin recaer en contradicciones mientras que
los testimonios de la supuesta vecina de la zona que
presenció los hechos no era clara además de no haberse
identificado para aportar pruebas en el juicio.
Según el encargado y el propietario del establecimiento, la
pared trasera del mismo tenía una perforación a varios
metros de altura con respecto al suelo, siendo conscientes
de los hechos ya que el sistema de seguridad saltó y la
señal acústica lanzó el aviso a los agentes de Policía,
popularmente conocido como el método del butrón. Estos
manifestaron haber acudido a la zona y no ver a nadie
durante la inspección del local, en el que tampoco faltaba
ningún objeto. Sin embargo, cinco minutos después de las dos
y media de la madrugada, la Policía recibiría un nuevo aviso
ya que una vecina de la zona había divisado a dos jóvenes en
el tejado del mismo.
A este respecto, uno de los agentes aseguró, durante el
juicio celebrado el 14 de octubre y luego el pasado día 11,
haber preguntado al acusado qué estaba haciendo por el
tejado y que este no había escapado de la zona, además de
añadir el que no hubiera contemplado martillo alguna en su
posesión. Mientras que otro argumentó haber contemplado a
dos chicos corriendo por los tejados colindantes.
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