Cuando está a punto de finalizar la primera parte del curso
escolar, el director provincial de Educación, Aquilino
Melgar, ha realizado un amplio repaso a las cuestiones más
importantes del panorama educativo de la ciudad. A pesar de
los malos resultados del último Informe Pisa, Melgar se
confiesa esperanzado en que la situación vaya cambiando con
el paso del tiempo. Los cimientos de un nuevo sistema ya
están en marcha y en este sentido, el director provincial
habló del refuerzo de las competencias en el profesorado,
algo fundamental para potenciar a los alumnos. Los problemas
de espacio en la ciudad parecen ir resolviéndose con las
últimas cesiones de terreno aunque, en Educación, aún queda
mucho por hacer.
Pregunta.- A pesar de que ya han transcurrido unos días
desde su publicación, las cifras del Informe PISA siguen
levantando ampollas...
Respuesta.- Sin embargo, desde mi punto de vista, este
informe no deja de ser un estudio encargado a una agencia
internacional... y luego no nos gusta lo que dice. PISA
habla sobre el nivel de unas competencias determinadas en
alumnos de quince años, con independencia de que estén en su
curso o repitiendo, y es justo en ese momento cuando se
producen mayores casos de abandono escolar. Es en ese sector
del alumnado donde se han obtenido peores resultados. Con
eso no quiero justificar nada, sólo constatar una realidad.
El informe nos dice que hay una serie de alumnos que no
alcanzan los niveles mínimos pero también nos dice que hay
otros que, con el mismo sistema educativo, sí lo alcanzan.
P.- Por tanto, ¿considera que ha habido un avance?
R.- Así es. Todos los países que han ido formando parte de
este informe, han realizado mayores inversiones. Aunque de
manera lenta, se va mejorando. Para ver ese avance hay que
comprobar las referencias anteriores. En el caso de España
tenemos datos desde el año 2000. En el de Ceuta es la
primera vez que tenemos una referencia concreta y estamos
situados donde esperábamos, dada la situación y los
problemas que tenemos. Pero entiendo que si, al igual que
ocurre con España, tuviéramos datos para poder comparar,
estoy seguro que también se podría observar una mejora y hay
que tener en cuenta que los resultados son relativos, no es
un suspenso o un aprobado. Aún así, no hay que contentarse
sino tratar de acelerar y tal y como están situados los
países y comunidades en las diferentes clasificaciones de
PISA, no tengo duda de que se van a producir cambios de
posiciones. Ahora bien, sí se producieran se corre el riesgo
de que haya alguna comunidad que quede descolgada
completamente, lo cual sí sería un problema muy grave. O que
todo el mundo progrese y nos quedemos con la misma
puntuación, situación que vivió España en 2006. Tuvimos un
descenso, no significativo, de unos 30 puntos con respecto
al dato anterior pero esa bajada significaba que no
llevábamos el mismo ritmo que el resto de países.
P.- Lo más preocupante en ese Informe PISA es el nivel de
comprensión lectora del alumnado, ¿no le parece? ¿Qué
solución es viable ante las dificultades lingüísticas de
gran parte de la población estudiantil en Ceuta?
R.- La comprensión lectora es totalmente básica, ya que
afecta al resto de asignaturas. Hay un gran problema a nivel
general y quizás nos hemos centrado mucho en los
conocimientos sintáticos, gramaticales... y nos estamos
olvidando de lo fundamental, que es leer y entender lo que
se ha leído. Las pruebas del informe no se salen de lo
cotidiano y sin embargo... Aún así, la LOE va a tratar de
potenciar esa competencia. Aquí, además, está el
inconveniente para acceder a la lengua que transmite los
conocimientos, lo cual complica más la situación. Aunque eso
no significa que no estemos avanzando. No hay una única
medida, debe ser la unión de varias la que contrarreste ese
problema. Para empezar, hay que potenciar la lectura.
Tuvimos una reunión con un experto en comunicación hace poco
que nos decía que si queremos que el alumno hable y se
exprese, hay que hacerle hablar. Por eso, se establece la
medida metodológica que vamos implantando, luego la cuestión
del refuerzo para que, además, los estudiantes que tengan
ese déficit no terminen abandonando el sistema educativo.
Hay programas de apoyo y acompañamiento, a más niveles que
antes. Además, las mayores diferencias entre los alumnos se
producen en las actividades dentro de los centros, por lo
que vamos a potenciar la autonomía de estos y darles la
oportunidad de que mejoren ellos mismos el programa
educativo que se imparte. Ya hay programas pilotos de
compromisos de mejora y para el año que viene se trasladarán
a todos los centros, a través de los contrato-programa.
Además, más recursos para los que se comprometan a implantar
compromisos de mejora, que ellos mismos puedan diseñar. En
PISA, se puede observar también a alumnos que se están
desarrollando con muy buenas competencias. Ese porcentaje,
aunque pequeño, también debe cuidarse. El apoyar a los más
débiles no tiene que significar que se descuide a los
mejores. Necesitan nuestra atención aquellas personas que
quieran ampliar conocimientos y también habrá programas
diseñados para ellos donde se harán trabajos específicos
para ellos. Probablemente se destinen a los estudiantes que
estén finalizando Primaria y estén a punto de empezar una
nueva etapa aunque se extenderán.
P.- ¿Qué ocurre con las comunidades extrapeninsulares?
¿Por qué todas están en la cola de la clasificación?
R.-Me parece normal. Tradicionalmente el desarrollo en el
sur siempre ha sido más difícil lo cual no deja de tener
relación con estas cifras. Es curioso pero real. Ceuta y
Melilla tienen unas características peculiares tanto a nivel
sociocultural como geográficas o territoriales, lo que hace
complicado compararlas con otras comunidades. Además de las
extrapeninsulares están en la cola Murcia y Andalucía, es
decir, todo el sur. Igual resulta que el progreso de estos
lugares en los últimos años ha sido mejor que las que están
por encima pero claro, sólo se ve el promedio actual, no se
puede comparar. Hace 25 años el mayor problema educativo en
Andalucía era la analfabetización y si lo miras con esa
perspectiva, se ha progresado muchísimo. En nuestro caso,
pasa algo parecido con un sector de la población adulta que
todavía necesita mejorar en conocimientos y lenguaje que
influye también en la población estudiantil. Para mí sería
fácil decir que se están analizando niños que se
escolarizaron en el año 2000 pero eso sería echar balones.
Tenemos que prever que el alumno que entra y que está
viviendo la implantación de un nuevo sistema educativo, como
es la LOE, donde se valora el trabajo por competencias,
mejore los niveles así como las siguientes generaciones.
Estoy convencido de que sí, los indicadores que poseemos
parecen señalar que se va a producir un cambio positivo.
P.- A pesar de esas perspectivas de mejora para el
futuro, ¿cómo se reparte la responsabilidad en los
resultados actuales?
R.- No se trata de señalar, aquí no hay un solo culpable.
Todos somos responsables y todos tenemos que sentirnos
culpables del sistema.
P.- Al hilo de lo que usted comentaba antes, sobre los
programas educativos, ¿cuántos se han puesto en marcha en
este curso?
R.-En total hay unas 17 acciones. Esta semana tendremos una
reunión en Madrid para implantar un programa que consolide
las competencias básicas. Trasladaremos la propuesta de
cuatro centros de Ceuta, dos de Primaria y dos de
Secundaria, para que los alumnos se puedan incorporar.
Además, los contratos programas que señalaba antes y, por
supuesto, la formación del profesorado que incidirá en la
mejora del rendimiento. Quizás no de forma inmediata pero sí
paulatinamente. En los tres últimos cursos hemos
multiplicado la formación del docente y también las acciones
del Centro de Profesores y Recursos.
P.- ¿Qué opina de la demanda de algunos sindicatos de
entrar en una Mesa de Negociación para Ceuta?
R.- Los plazos para su creación a todos nos gustaría que se
acortaran. Estamos llevando a cabo acciones para acelerarla
y al final habrá una posibilidad de que los representantes
del profesorado puedan estar en ella. Una Mesa de
Negociación que, por otro lado, ya existía y creo recordar
que su última reunión fue en marzo de 2010. Estoy a la
espera también de que se nos convoque, por parte del
Ministerio de Educación, a una nueva reunión.
P.- ¿En qué fase está el proceso de ampliación del colegio
Ortega y Gasset?
R.- No se ha producido novedad en este último apunte. Quizás
la información no fluyó tan bien como debería y de ahí el
conflicto con ese colegio. La intención inicial de hacer
toda la obra de una vez derivó en la cuestión de las dos
aulas. El proyecto que salió adelante no era el que nosotros
sabíamos que necesitaba el centro. Desde un primer momento,
fuimos conscientes de que una obra con una partida
presupuestaria ya adjudicada no podía pararse. A mí me
preocupaba que los cimientos para construir esas dos clases
pudieran garantizar una futura continuación y para ello
viajé a Madrid. El viernes mandamos la programación de obras
para que se retome la segunda fase del proyecto. Lo que aún
no se sabe es la distribución de esas clases. Pero, en
cualquier caso, la asociación de padres tendrá todas las
confirmaciones por escrito, tal y como demandaban. Me
hubiera gustado resolver ese tema de otra manera pero,
afortunadamente, ya está solucionado.
P.- ¿Y el resto de ampliaciones previstas? Se ha hablado de
diferentes parcelas...
R.-Pedimos en diciembre de 2009 Loma Colmenar y
prácticamente está cerrada su cesión. Contamos ya con ese
espacio, dada su aprobación en la Asamblea, y que Patrimonio
del Estado lo aceptará. En la programación de obras, para el
año 2011, damos como prioritario el estudio y el proyecto de
esa parcela. Debe estudiarse dada su peculiaridad. Si se
tiene un solar adecuado donde simplemente hay que construir,
no hay problema. Sin embargo, el solar es muy complicado,
hay que construir el terreno dada la pendiente tan grande
que tiene. Pensamos que se aprobará aunque esta cesión ya
llega tarde, porque ya no es un problema. Será un alivio
para estas zonas expansión. Nos queda todavía el enclave de
Parques Ceuta. Una parte de los terrenos de ‘Fuentes Pila’ y
‘Fiscer’ está reservada para Educación y queremos contar con
esa cesión lo antes posible. Ahora hay problemas para que se
haga la compra completa y la Ciudad lo que ha pedido es que
se parcele y que Defensa lo venda a precio de suelo
dotacional y que nos lo ceda. Lo último que se ha hecho es
pedir a la Ciudad 12.000 metros cuadrados para la
construcción de centros y esta iniciará las gestiones con
Defensa. Ahí será más fácil porque el suelo tiene otras
características. En cuanto a la zona de Varela, ahí la
Ciudad pensaba construir un centro de primer ciclo y al
final ha desechado la idea. Nos ha ofrecido ese terreno pero
no es una zona adecuada. Es verdad que estamos muy
necesitados pero tampoco nos vale todo. Tenemos que estudiar
en qué medida ese ofrecimiento puede ser más aprovechable,
aunque lo agradecemos. También se ha hablado de la cesión de
la Facultad de Humanidades, que se trasladará a otra
ubicación, situación que nos vendría muy bien. En cualquier
caso, se estudiará todo.
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