Los usuarios del parque de San Amaro han quedado satisfechos
con la recién estrenada reforma. Ayer, día de la Inmaculada
el parque se encontraba totalmente lleno de niños, que
algunos de ellos, demandaban más columpios para poder jugar.
Los más mayores por su parte, conociendo el jardín más en
profundidad, echaban en falta la fuente de la entrada con su
monumento y con sus patos.
La festividad del día de la Inmaculada que se celebró ayer,
no se notaba precisamente por la muchedumbre en las calles
del centro de la ciudad, sino por el aspecto familiar que
mostraba del recién reformado parque de San Amaro. Eran las
12 de la mañana y la luz sol proyectaba una bonita estampa
cuando se reflejaba en el agua de la inmesa fuente que se
encuentra a la entrada del jardín. Niños correteando por los
senderos que se han habilitado por los alrededores del
parque, no faltaron. Muchos de los que se encontraban en San
Amaro era la primera vez que acudían después de la
remodelación y todo eran palabras bonitas las que se oían
referidas al parque.
Herminia Guillén de 82 años es una de la que visitó las
nuevas instalaciones e iba acompañada por su hija y su
yerno, todos comentaban lo bien que ha quedado, sin embargo
Guillén murmuraba “sí, está muy bonito, ha quedado
impecable, pero yo echo en falta la fuente de la entrada,
sus esculturas y sus patos”. Subiendo por las sendas que
llevan al monumento que han realizado en honor al día de ‘la
mochila’, se oían a niños decir “papá quiero montarme en el
columpio”, y el padre responder “tendrás que esperar tu
turno”. Beatriz Beltrán tiene tan sólo 10 años, pero hizo su
crítica personal con la reforma del parque y expresaba “me
gusta mucho como ha quedado, pero antes teníamos más
columpios, más casas para jugar”. Su padre, Manuel Beltrán
de 45 años, apoyaba la teoría de su hija, y añadía que “han
limitado mucho el espacio para los niños, la zona con la que
se disponía antes era bastante más amplia, aún así no dejo
de reconocer la labor realizada”, concluía.
Todos los entrevistados en el día de ayer en el parque de
San Amaro casualmente era la primera vez que iban y todos
valoraron mucho la reforma, excepto algunos que echaban de
menos la escultura de la fuente principal, pero que hay que
decir que está en proceso de restauración y que en breve
volverá a su lugar de origen, además de que queda por
instalar un parque infantil de 400 metros cuadrados.
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