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A lo largo de esta semana se ha empezado a impartir el curso
de ‘Auxiliar de enfermería en rehabilitación’, con el que se
pretende formar a los desempleados en esta rama sanitaria.
Los alumnos obtendrán conocimientos en esta especialidad a
lo largo de los tres meses del curso y después podrán
ponerlos en prácticas en las distintas empresas que tienen
previstas.
El Instituto Almina acode desde el pasado 22 de noviembre el
curso ‘Auxiliar de enfermería en rehabilitación’, organizado
por Forem-Ceuta de CCOO. Esta iniciativa está dirigida a
personas desempleadas y que solicitan formación en la rama
sanitaria.
Según una de las profesoras, Elena González, el curso consta
de tres partes. “La primera está enfocada a modo de
introducción para que los alumnos conozcan el lugar que
ocupan los auxiliares de enfermería dentro de la
rehabilitación, así como las funciones específicas que
tienen que realizar al paciente”. La segunda trata de
enseñar a los participantes cómo manejar el tema de
documentación sanitaria en esta unidad. Y la tercera parte
se centra en la comunicación y atención al usuario, cómo
deben dirigirse a estos y para ello hacen simulaciones con
una especie de teatros donde cada participante asume un rol
distinto y tiene que ir dando solución, atender al paciente
en función de cómo se presente. “La idea es que asimilen
ciertas situaciones que van a desarrollar con un usuario en
la unidad de rehabilitación”. La última fase del curso les
enseñará temas fisioterapéuticos.
La profesora asegura que utilizan mucho soporte informático,
audiovisual, para que los alumnos puedan ver determinadas
situaciones con las que se pueden encontrar. Ayer, por
ejemplo vieron la película ‘A propósito de Henry’, a través
de la cual pretende abrir un debate entre los alumnos,
“también que tomen conciencia de determinados
comportamientos que deben tomar si en alguna ocasión se
encuentran en una situación similar a la de la película”,
exponía González
Algunos de estos alumnos cuando acaben el curso, el próximo
mes de marzo, realizarán las prácticas en distintas empresas
que “aún hay que determinar”, pero que barajan la
posibilidad de “la piscina del ICD, la residencia de
mayores, entre otras”, expresaba la encargada de impartir el
curso.
El perfil de estos alumnos es de entre 40 y 42 años de edad
y la mayoría son mujeres.
González destacaba que es la primera vez que “se realiza
este curso de auxiliar, y es sorprendente la buena acogida
que ha tenido. Es interesante también saber que muchos de
los que asisten nunca antes habían tocado la rama de sanidad
y se han dispuesto a estudiarla ahora”.
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