El Salón del Trono fue el escenario en el que los 37 imames
ceutíes recibieron su diploma de español a manos de los
representantes de las instituciones que han hecho posible el
primer curso destinado a líderes de comunidades islámicas,
entre ellas, el Instituto Cervantes de Tetuán, la Fundación
Premio Convivencia, la UNED, y la Fundación Pluralismo y
Convivencia, del Ministerio de Justicia.
“Es muy llamativo ver las categorías de profesiones de la
Seguridad Social y sólo tres no tienen un respaldo académico
formal: imam, rabino y pastor. Esta iniciativa es un paso
previo y estamos viendo cómo generar algo más estable en la
universidad, como un grado de ciencia de las religiones
donde se pueda abordar no sólo el hecho musulmán sino otros
como el judío o el protestante. Es una necesidad que las
próximas generaciones van a tener”. Con esta palabras evaluó
el director de la Fundación Pluralismo y Convivencia, José
Manuel López, el éxito de esta primera edición del curso de
español para líderes de comunidades islámicas, por el que
ayer recibieron su diploma 37 imames ceutíes.
El Salón del Trono del Palacio Autonómico fue el escenario
donde se llevó a cabo la entrega de los certificados,
presidido por el director del Instituto Cervantes de Tetuán,
Luis Moratinos, la presidenta de la Fundación Premio
Convivencia, Mabel Deu, el presidente de la UCIDCE, Laarbi
Maateis, así como el representante del Ministerio de
Justicia. Este, además, recalcó que “el tema musulmán ya no
es un tema de inmigrantes, sino de españoles, por lo que
debe estar metido en la lógica social de este país porque un
6% de la población es creyente de una confesión no católica.
En esa lógica, las Administraciones debemos dar un paso para
que se normalicen todos los procesos de formación de los
libros religiosos”, argumentó López.
Moratinos y la presidenta de la Fundación Premio
Convivencia, Mabel Deu calificaron esta experiencia piloto
de “ambiciosa, interesante y de futuro”, agradeciendo la
unión de esfuerzos entre la UNED, el Cervantes, la Ciudad y
la Fundación Pluralismo y Convivencia. “Ha sido romper una
brecha en el sentido de que todos pueden conocer la otra
lengua, la española, y con esto las barreras se abrirán del
todo y se comprometerán mucho más en este aprendizaje”,
reiteró Moratinos.
Antes de proceder a la entrega de los diplomas de iniciación
a la lectoescritura a 26 alumnos y el A1 a otros 11
participantes que ya conocían el alfabeto español, el
presidente de la UCIDCE quiso agradecer tanto a la Ciudad
como al Gobierno de la Nación, el “impulso, la ayuda y la
cooperación a la Comunidad Islámica para esta formación”.
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