El presidente de la Confederación Hidrográfica del
Guadalquivir, Joaquín Castillo Sempere, visitó ayer junto al
delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, los embalses
del Renegado y del Infierno además de las dependencias de la
CHG en la ciudad y la ampliación de la planta
desalinizadora. La visita de Castillo a Ceuta concluyó con
la firma del acta de entrega de la recepción de las obras de
encauzamiento del arroyo de Benítez-Guillén, en el que se
han invertido dos millones de euros y cuyas actuaciones, que
finalizaron en septiembre de 2009, suponen una mejora
“histórica”.
El presidente de la Confederación Hidrógrafica del
Guadalquivir, Joaquín Castillo Sempere, recepcionó ayer
junto al delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, las
obras de encauzamiento del arroyo de Benítez-Guillén. Las
actuaciones finalizaron “en septiembre del año pasado” y han
supuesto una inversión de dos millones de euros. Además,
“han significado una mejora muy importante para toda la
barriada de Benítez” ya que la zona baja “se inundaba de
forma constante”. Según Fernández Chacón, durante las
lluvias del año 2009, “se comprobó que funcionaba
perfectamente y no se ha vuelto a producir ninguna
inundación”.
Por su parte, el presidente de la CHG, ratificó las palabras
de Fernández Chacón y aseguró que “se ha eliminado un
problema histórico de Ceuta y se seguirá el mismo trabajo de
ir encauzando otros arroyos de la Ciudad Autónoma”. En estas
futuras actuaciones el Ministerio de Medio Ambiente y Medio
Rural y Marino tiene previsto invertir un total de 5
millones de euros. Castillo Sempere también se refirió a las
otras visitas que realizó durante la mañana de ayer. En
primer lugar, la comitiva conoció de primera mano la
situación en la que se encuentran los embalses del Renegado
y del Infierno en los que “se está de forma continua encima
de ellos, arreglándolos. Se han visto las obras de
emergencia que se han realizado en ambos”. Además, también
estuvieron presentes en las dependencias de la Confederación
para de forma posterior visitar el embalse del Infierno y la
ampliación de la planta desalinizadora, que estará lista
para marzo de 2012 a pesar de los últimos atrasos a causa de
“problemas de explanamiento”, tal y como comentaba el pasado
miércoles el propio Castillo en rueda de prensa.
Para el delegado, esta inversión de la CHG en
Benítez-Guillén ha supuesto “solucionar un problema
importante para la barriada y también en cuanto al
encauzamiento del arroyo de Guillén”. Además, también se han
llevado a cabo “encauzamientos en diversos arroyos mejorando
los cauces y mejorando la posibilidad” para que, en el caso
de la llegada de grandes cantidades de agua, “se puedan
producir inundaciones”, informa.
Actuaciones de futuro
El presidente de la CHG y el delegado no dudaron en destacar
la importancia de la política que está realizando el
Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino en
Ceuta. Y es que, hasta el año 2015, el Ministerio, a través
de la Confederación, tiene previsto invertir en el
saneamiento, abastecimiento y encauzamiento de la ciudad un
total de 71.200.000 euros, lo que supondrá actuaciones como
la mejora de diversos núcleos de población -Villajovita o
Loma Colmenar-, o la ampliación de la Estación de Agua
Potable (ETAP).
En relación a los embalses, se han previsto actuaciones en
galerías y obras complementarias. Para el Renegado se
realizará un desagüe de fondo y se actualizará el sistema de
información geográfica en la red de agua de Ceuta para
disponer de un cuadro de mando determinado para conocer las
pérdidas o los caudales. En relación al saneamiento y
abastecimiento, el plan para la barriada de Príncipe Alfonso
se encuentra en fase de supervisión. El Puente del Cristo
también dispondrá de un nuevo colector general que irá hasta
San Amaro.
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El objetivo, solucionar las deficiencias en abastecimiento
El presidente de la Confederación
Hidrográfica del Guadalquivir, Joaquín Castillo Sempere,
aseguró que la nueva planta desaladora -que estará
finalizada para el mes de marzo de 2012-, “acabará con los
problemas que ha tenido la Ciudad Autónoma históricamente”
en lo que se refiere al abastecimiento de agua. Además,
Castillo también ha destacado en su visita a Ceuta que uno
de los objetivos prinicpales es eliminar las grandes
pérdidas de agua. Hace unos años se encontraban “al 50%” y
en la actualidad se han logrado reducir al 20-25%. Sin
embargo, la cifra ideal sería la que oscilaría entre
pérdidas del 10-15%, es decir, “lo que supondría la
normalidad en cualquier ciudad”.
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