Dos años de prisión fue la pena decretada por los
magistrados de la Audiencia Provincial para un hombre que
admitió ser responsable de un delito contra el derecho de
los ciudadanos extranjeros.
Al carecer de antecedentes penales, los jueces resolvieron
aplicar la condicional al imputado por lo que, en lugar de
cumplir la pena privativa de libertad, no podrá regresar a
la ciudad autónoma ni delinquir durante dicho periodo o, de
lo contrario, se le revocaría la sentencia. Según consta en
el escrito de acusación, fueron los agentes de la Guardia
Civil destinados en la zona de preembarque de vehículos de
la Estación Marítima, los que localizaron en la autocaravana
del imputado a una persona indocumentada, que iba en el
cuarto de baño del turismo, bajo llave. Sin embargo, el
propio procesado reconoció durante su declaración en
Instrucción, que ese 17 de octubre se habían introducido en
el habitáculo tres inmigrantes, de los cuales dos lograron
escapar y que el tercero, fue el que quedó dentro de la
caravana. Aunque ninguno le había pagado nada ya que
desconocía de su presencia.
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