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Los magistrados de la Audiencia condenaron ayer a dos
feriantes que en las Fiestas Patronales de 2008 se
lesionaron mutuamente por un disputa que tuvo como origen el
robo de una rampa que había entre dos atracciones. Uno de
los acusados respondió por el delito de lesiones, por el que
tendrá que pagar 540 euros de multa y una indemnización de
3.000 euros al otro acusado, al que le rompió un diente.
Dos feriantes ocuparon ayer el banquillo de los acusados de
la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta,
uno de ellos por un delito de lesiones que le imputaba el
representante del Ministerio Fiscal en la ciudad, y el otro,
por una falta de lesiones.
Los dos reconocieron los hechos por los que se les acusaba,
así que el autor del delito tendrá que hacer frente a una
multa de 540 euros y una indemnización de 3.000 euros que
tendrá que pagar al otro encausado, ya que le rompió un
diente que le costó recuperar diez días.
Mientras que el segundo procesado tendrá que abonar una suma
de 90 euros por una falta de lesiones ya que lesionó el
labio del anterior aunque a este sólo le costó tres días de
curación.
Los hechos tuvieron lugar el 11 de agosto de 2008 en una
reyerta en el propio recinto ferial. Los dos feriantes
iniciaron la disputa ya que habían sufrido el robo de una
rampa que se encontraba situada entre sus dos atracciones.
Confundidos, terminaron la discusión con las manos y la
misma se saldó con la rotura de un diente en uno de los
acusados y una herida en el labio del otro.
El juicio se celebró bajo la figura jurídica de la
conformidad ante las penas que para los dos acusados
solicitaba el representante del Ministerio Fiscal en la
ciudad.
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