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El Consejo de Gobierno aprobó el viernes una ampliación del
plazo de ejecución de las obras del Teatro Kursaal-Nacional,
debido al retraso que ha provocado en los trabajos las
distintas incidencias que se han ido produciendo desde el
inicio de la rehabilitación. Por este motivo, las obras se
retrasarán algo más de dos meses y no estarán finalizadas
hasta mediados de febrero.
Según explicó el portavoz de la Ciudad Autónoma, Daniel
Conesa, con esta ampliación propuesta por la Consejería de
Fomento, las obras pasan a tener un plazo de ejecución de
19,1 meses, frente a los 16,8 meses que estaban previstos en
el momento de la adjudicación.
Por lo tanto, este retraso es de algo más de dos meses, de
modo que la inauguración no será probablemente hasta
mediados de febrero del año que viene, calculó el portavoz.
Esto será posible gracias a que en breve comenzarán también
los trabajos de equipamiento del edificio, a pesar de que
las obras no están todavía finalizadas. A pesar de ello,
mientras se desarrollan los trabajos de rehabilitación del
inmueble, los operarios comenzarán a instalar el
equipamiento escénico y los aparatos de iluminación, sonido,
butacas, proyección digital, etc.
Cabe recordar que este equipamiento fue adjudicado hace sólo
un mes a la empresa especializada Chemtrol División de
Teatros, por un coste de 2.832.531 euros.
La inauguración del Teatro Kursaal-Nacional se llevará a
cabo con alguna actuación de tipo musical o algún
espectáculo, que servirá para poner el broche de oro a los
trabajos de “una gran obra que los melillenses van a poder
disfrutar” después de más de año y medio de obras.
“Sin apoyo de nadie”
En este sentido, el portavoz recordó que el Gobierno local
ha llevado a cabo este proyecto “contra viento y marea sin
apoyo de nadie”, debido a las numerosas críticas que se han
lanzado desde los grupos de la oposición al respecto. “Lo
único que han hecho es destruir”, acusó Conesa a PSOE y CPM,
a los que echó en cara algunas de sus acusaciones, como “los
famosos pilares modernistas que decían que se los estaban
llevando en un camión marroquí”.
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REFORMA
