El diputado ceutí en el Congreso y consejero de Hacienda,
Francisco Márquez, promoverá a través del Grupo Popular la
solicitud de información en la Comisión de Defensa acerca de
“la realidad y los planes” para la Base Única de Ceuta y
también sobre la “distribución entre los distintos empleos
militares” del previsible recorte de efectivos. Márquez cree
“lamentable” que el Ministerio haga depender la inversión en
la nueva Base de la compra de terrenos por la Ciudad, pues
eso ofrece “pocas garantías” respecto a sus planes.
El diputado nacional por Ceuta, Francisco Márquez, va a
promover a través del Grupo Popular en la Comisión de
Defensa del Congreso la solicitud de información acerca de
“la realidad y los planes” para la Base Única de Ceuta y
también sobre la “distribución entre los distintos empleos
militares” de los previsibles recortes de personal.
El también consejero de Hacienda de la Ciudad, que ha tenido
un papel decisivo en los acuerdos de compra de suelo con el
Ministerio, considera “lamentable” que Defensa haga depender
el desarrollo de la construcción de la Base de estas
operaciones financieras con la administración local. Márquez
subraya el apoyo que desde la Ciudad se ha dado desde un
principio al proyecto de la Base Única, “a la concentración
de unidades y renovación de elementos humanos y materiales”,
aunque recordó que desde que se generó, hace casi seis años,
“aquello se quedó como casi todos los proyectos del actual
Gobierno, muy en el papel y poco en la realidad”. “Este
proyecto se ha quedado aletargado en el tiempo y además
desfasado con respecto a lo que se ha hecho en Melilla,
donde la Base sí que ha teni do partidas presupuestarias y
las sigue teniendo”, apunta el responsable de Hacienda.
En esta situación, la Ciudad dio “un paso adelante” con las
propuestas de adquisición de suelo desafectado del uso de
Defensa para la construcción de vivienda protegida y
equipamientos y ligándolo a ese plan de reorganización del
Ejército, “porque creíamos que se abría una oportunidad para
que la Ciudad consiguiera los objetivos que le corresponden
en función de sus competencias y responsabilidades y que
además se podría cumplir ese plan de Defensa”. “Eso no
quiere decir -aclara- que el Ministerio tenga que ligar la
evolución presupuestaria del proyecto a la posibilidad de la
Ciudad de ir desembolsando dinero para la compra de suelo
actualmente ocupado por instalaciones militares, sino que el
proyecto ha de tener presupuesto propio y no sólo
dependiente de lo que aporte la Ciudad”.
Márquez cree con todo que Defensa “debe acometer la Base
Única de una vez por todas y no consignando en los
presupuestos cantidades prácticamente simbólicas”, como es
el caso de los 1,8 millones de euros contemplados para 2011.
“Comprendemos los recortes en los presupuestos de los
ministerios, fruto de la nefasta política del Gobierno
socialista y que una vez más han afectado especialmente a
Defensa”, concluyó el parlamentario.
Dudas sobre el personal
Respecto los recortes de personal destinado en la ciudad
autónoma, sobre los que Márquez recordó que ya se suscitó el
debate hace dos años, el consejero reiteró lo dicho entonces
por el presidente de la Ciudad, Juan Jesús Vivas, que este
asunto “debe ser examinado no sólo a la luz del despliegue
operativo y las necesidades de la Defensa Nacional”, aunque
este último sea el primer condicionante”. “Como casi todo en
Ceuta y en Melilla, este asunto tiene que examinarse también
teniendo en cuenta las especificidades de las dos ciudades y
la necesidad de la presencia militar en ambas”, concluye.
Márquez recordó que en 2008 la ministra “se comprometió a
que el número global de efectivos no iba a variar, aunque
nunca se nos aclaró si la distribución por categorías,
oficiales, suboficiales, tropa..., era lo que iba a ser
reexaminado, y ahora tampoco lo tenemos claro”, indicó.
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“La presencia militar y su arraigo en Ceuta son muy
importantes”
Márquez destaca el apoyo de la
Ciudad al proyecto de la Base Única y a la reordenación y
mejora de la operatividad del Ejército, y de hecho considera
este apoyo a las Fuerzas Armadas como “parte de la esencia
de Ceuta” y al Ejército como “acompañante natural de su
evolución histórica”. Lo militar guarda además relación en
Ceuta “con el arraigo de la población, con el hecho de que
su presencia nos inspira esa confianza básica y una imagen
necesaria y también con que la permanencia de esas familias,
en muy distintos grados o categorías de las unidades
militares, es muy importante desde el punto de vista
económico”, pues “no es igual el arraigo, la renta y la
capacidad de consumo de oficiales que de los empleos
temporales o de tropa”.
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