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El director general de Protección Civil y Emergencias, Ángel
Javier Gómez, ha querido resaltar la labor social que cumple
esta entidad ante situaciones de peligro para la ciudadanía,
entre las que destacan las de situaciones de catástrofes
medio ambientales, acciones humanitarias o las que realizan
en servicios de alarmas y evacuación en cualquier desastre,
calamidad o accidente, por poner sólo unos ejemplos.
La Protección Civil nació el 12 de agosto de 1949 en el
protocolo uno adicional al tratado de ginebra “protección a
las víctimas de los conflictos armados internacionales”.
Según transmite en un comunicado el director general de
Protección Civil y Emergencias Ángel Javier Gómez, es el
sistema por el que cada país, comunidad o ciudad autónoma, o
ayuntamiento proporciona la protección y asistencia a todos
los ciudadanos.
Tareas como actuar ante cualquier tipo de catástrofe o
accidente así como salvaguardar los bienes y el medio
ambiente mediante labores humanitarias son acciones
destinadas a proteger a la población. Además ayudar a
quienes lo necesiten y facilitarle las condiciones
necesarias para su supervivencia.
Entre las actividades fundamentales que realiza Protección
Civil destaca el servicio de alarma y evacuación ante
cualquier desastre, calamidad o accidente; habilitación y
organización de refugios y salvamento, servicios sanitarios,
incluidos los primeros auxilios y asistencia en actos
religiosos, o la lucha contra los incencios.
El postulado “básico y fundamental” de la Protección Civil
es salvaguardar la vida de las personas, sus bienes y el
entorno, y en rasgos generales gestionar los servicios de
emergencias e involucrando a todas las partes con las que
cuenta la Ciudad (Bomberos, Policía Local, Cruz Roja, Medio
Ambiente, Servicios Sociales, Obimace, etc) así como de los
dependientes del Estado (Policía Nacional, Guardia Civil,
061).
También dispone de agrupaciones de voluntarios de Protección
Civil, organismos locales formados en exclusiva por estas
personas como apoyo a los servicios operativos de
emergencias a requerimiento de los mismos.
Para finalizar, destacar la puesta en marcha de campañas de
autoprotección en campos o grupos sensibles de registrar o
padecer accidentes, como ancianos y niños y la elaboración
de planes de autoprotección ante calamidades o siniestros,
ya sean motivados por agentes naturales o provocados por la
actividad humana.
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