Cinco subsaharianos han sido interceptados por la Policía
Nacional entre los roqueos de Fuente Caballo en la mañana de
ayer después de una complicada travesía desde las costas
próximas a la frontera en Marruecos a merced de la fuerte
marea de poniente que se registraba sobre las 9’30 horas
cuando la balsa neumática, en la que viajaban, se deshizo
contra una de las rocas a escasos metros de la orilla. A
esas horas, Salvamento Marítimo, Guardia Civil y el
helicóptero buscaban a una patera en el Estrecho después de
una llamada realizada desde un móvil marroquí alertando de
las supuestas dificultades de decenas de subsaharianos.
La Policía Nacional, alertada por varios vecinos de la zona,
logró interceptar y proporcionar la ayuda necesaria a cinco
subsaharianos que habían logrado alcanzar ayer, sobre las
9’30 horas de la mañana, la orilla de Fuente Caballo tras
una complicada travesía, con salida en las costas marroquíes
próximas a la frontera.
Cuatro varones y una mujer, todos adultos, llegaron ayer a
Ceuta en una balsa neumática que quedó destrozada a pocos
metros de la orilla después de varar en una de las rocas
cercana a la cala de Fuente Caballo. Uno de los inmigrantes
se hirió en una ceja como consecuencia de un golpe contra el
roqueo, que necesitó atención de los técnicos del 061, en el
lugar tras ser alertados de esta situación.
A esas horas de la mañana había cierta confusión. Una
llamada a Salvamento Marítimo avisaba de una embarcación con
inmigrantes hacia la península por el Estrecho, motivo por
el que se activaron los dispositivos de búsqueda. Partió la
Gadir desde su base de Ceuta, también el helicóptero
rastreando la zona próxima a la costa norte de la ciudad, y
también se incorporó la embarcación del Servicio Marítimo de
la Guardia Civil. El SIVE no veía embarcación alguna en sus
radares, según ha sabido EL PUEBLO por fuentes de los
servicios de seguridad. La espesa bruma originada por la
borrasca dificultaba las labores. Una rellamada al móvil
marroquí desde donde partió el aviso de alerta informaba de
que la patera seguía cerca de las costas del norte de Ceuta.
La Guardia Civil peinaba Benzú hasta Benítez sin éxito,
mientras que las embarcaciones de búsqueda trataban de
localizar la nave de los inmigrantes.
Coincidente con esos horarios, el aviso ciudadano de la
llegada de subsaharianos a los roqueos de Fuente Caballo
hizo actuar a la Policía Nacional, que acudió al lugar donde
efectivamente cuatro hombres y una mujer habían alcanzado
ya, sobre las 10’00 horas de la mañana, tierra ceutí.
Un patrol de la Guardia Civil de la Unidad de Costa se
incorporó al operativo que a esas horas ya controlaba la
Policía Nacional.
Los cinco inmigrantes fueron llevados hasta la Jefatura
Superior para ser filiados en incorporados al Centro
Temporal de Inmigrantes.
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