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Sin dudas que, el no haber
conseguido el Sr. Ministro el consenso necesario para sacar
adelante el Pacto por la Educación, le ha supuesto un duro
revés hasta el extremo que, sin eliminar la LOE, modificar
algunos aspectos. El de mayor implicación, la división de 4º
de la ESO en dos opciones: una para que los que quieren
enfocar sus estudios a Bachillerato y otra para los que
piensan estudiar FP.
Convertido en un curso puente al ciclo siguiente, se
concibió como una estrategia para inducir al alumno a seguir
estudiando, habida cuenta del objetivo europeo de que
situemos en el 85% la tasa de titulación de Secundaria
Superior. Ahora, nosotros partimos con 73% (¿?).
Tan importante cambio pretende ser introducido en la LOE a
través de una enmienda del Grupo Socialista a la Ley de
Economía Sostenible, actualmente en trámite. Al parecer
tiene sentido hacerlo, porque en esa Ley, ahí hay un
apartado importantísimo dedicado a la Formación Profesional
según argumenta un alto cargo de la Comisión de Educación en
el Congreso.
Pero, conviene tener presente que la reforma hipotética de
4º de ESO no afecta sólo a los que van a estudiar FP, sino a
todos los alumnos –dado que este curso es obligatorio-
incluidos los que vayan a Bachillerato.
Expuesto así, someramente, sin contemplar las materias de
las dos opciones, FP y Bachillerato, para aquellos con el
mismo compromiso de responsabilidades educativas, darían el
visto bueno para esta oferta de elegir “a la carta” se
llevara a la práctica. Pero, siempre surgirá el desacuerdo
por parte del PP, que ya de entrada lo califica como un
“despropósito” sabiendo de antemano que el Gobierno
descartará someter a debate alguno la modificación de la
LOE, que afirma que la misma quedará prácticamente igual.
Sólo se incorporan al artículo 25 las materias nuevas para
hacer posible la opcionalidad.
Las materias actuales de 4º de la ESO, son: COMUNES:
Ciencias Sociales, Geografía e Historia; Educación
Ético-Cívica; Educación Física; Lengua Castellana y
Literatura y, si la hubiese, Lengua Cooficial y Literatura;
Lengua Extranjera; Matemáticas. OPTATIVAS, (a elegir tres
asignaturas): Biología y Geología; Educación Plástica y
Visual; Física y Química; Informática; Latín; Música;
Segunda Lengua Extranjera; Tecnología.
Propuesta del Gobierno: OPCIÓN A: Las comunes más tres a
elegir de cada opción. Hacia Bachillerato: Biología y
Geología; Educación Plástica y Visual; Física y Química;
Informática; Latín; Música; Segunda Lengua extranjera.
OPCIÓN B: Las comunes más tres a elegir de cada opción;
Hacia FP Diseño; Química aplicada; Informática; Tecnología;
Alimentación y Nutrición; Orientación para la actividad
Empresarial; Seguridad y Salud Laboral; Responsabilidad
Social.
El PP, por encima de lo considerado anteriormente, pensando
que la “oferta a la carta” no tiene sentido, considera que
no hay dinero en las Administraciones (Comunidades con
competencias educativas).
Por otro lado, siguen manifestando los del PP, que la
“oferta a la carta” favorece que muchos alumnos escojan las
materias más fáciles para aprobar el curso, por lo que lo
aconsejable sería que las optativas deberían ser las mismas
para todos los alumnos de cada grupo.
También recuerda la oposición, que estos son los itinerarios
que el PSOE rechazó por segregadores, cuando el Gobierno de
Aznar apostó por ellos en su Ley Educativa (la LOCE). La
diferencia es que entonces se introducía la obligación de
elegir en 3º de la ESO.
Dando por posible que el Proyecto saliera adelante, sería
sin el consenso del PP.
Otra cuestión sería cuándo puedan entrar en vigor los
cambios en caso de aprobarse. El recorrido del Proyecto
sería el siguiente: En primer lugar el Gobierno tendrá que
aprobar un Real Decreto, o modificar el existente, sobre los
contenidos mínimos en Secundaria. Después, cada
Administración autonómica debería hacer sus desarrollos
curriculares. Aunque la Ley de Economía Sostenible se
aprobara antes de fin de año, difícilmente habría un nuevo
4º de ESO el curso que viene.
Preocupa lo que ocurrirá cuando, una vez llevada a cabo la
aprobación del Proyecto, el producto que saldrá de cada una
de las Administraciones, que como bien sabemos, las
diecisiete autonomías, con todo el bagaje de competencias,
qué es lo que ofrecerán. Porque sólo las llamadas Ciudades
Autonómicas, Ceuta y Melilla, podrán adaptarse al nuevo
Proyecto.
Los momentos actuales son vitales para mejorar nuestro
Sistema Educativo, aunque hay que “sacrificar” el 4º de la
ESO, en su doble opcionalidad. Todos los “opinadores” están
de acuerdo con que la educación es el mejor remedio para,
incluso, salir de la crisis, y cambiar nuestro ineficiente
modelo productivo. Lo ha dicho el S. M el Rey, el Ministro
de Educación, que está en ello, y banqueros como botín, en
sus intervenciones recientes en ciertas Universidades.
Necesitamos más educación, por supuesto, pero la necesitamos
mejor; el reto principal es pues, “la buena educación”.
Una formación que, en cualquier nivel, dosifique con
inteligencia los mejores contenidos, la adquisición de
destrezas, habilidades y uso de herramientas y la educación
en valores. La elección de contenidos siempre se consideró
prioritaria. Ahora existe una apuesta clara e indiscutible
por formar en capacidades y destrezas… La necesaria
regeneración de nuestro país necesita pasar por recuperar
valores fundamentales como el esfuerzo, el respeto y la
convivencia…
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OPINIÓN / EL MAESTRO
