La presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer de
Ceuta, Minu Sunderdas, declara que celebra “tanto el Diwali
como la Navidad” porque, según afirma, “siente” el lugar del
que forma parte, la propia ciudad. Sunderdas señala que “las
fiestas religiosas no se diferencian en nada: todas
consisten en compartir valores de paz y no violencia” y
explica que en la AECC “la fiesta se desarrolla todos los
días”.
Ha formado parte de la Cámara de Comercio de la ciudad y de
su Asociación de Mujeres Empresarias, y actualmente es la
presidenta de su Asociación Española contra el Cáncer (AECC).
Además, celebra “tanto el Diwali como la Navidad” porque la
siente “quizá más” que esta fiesta tradicional de la
comunidad hindú. Minu Sunderdas declara que siente el Diwali
y a la vez siente el lugar en el que vive porque “forma
parte” de esta sociedad.
“Fui educada en colegio de religiosas con unos valores, y
tanto mi marido como yo hemos educado en valores a nuestros
hijos” declara Sunderdas. “Pienso en español, hablo en
español y siento que la Navidad también forma parte de
nuestra familia y nuestro hogar: a eso se le llama
integración; yo vivo lo que siento” declara.
La presidenta de la AECC declara que “las fiestas religiosas
no se diferencian en nada: todas consisten en compartir
valores de paz y no violencia, en escuchar, en transmitir”.
“En estos momentos de crisis en los que todos vamos siempre
estresados las fiestas como el Diwali o la Navidad llegan
para que todos nos paremos y recapitulemos” afirma Sunderdas,
que añade que “el problema es cuando todo se convierte en
marketing y la fiesta deja de ser de recogimiento: es como
pasa, por ejemplo, cuando en el mes de noviembre y hasta en
octubre ya están los centros comerciales llenos de árboles
de Navidad y todo se transforma en únicamente consumir”.
Fiesta diaria
“En la Asociación Española contra el Cáncer la fiesta se
desarrolla todos los días” declara su presidenta, que añade
que “esto significa que haya un buen trato entre sus
profesionales y trabajar con cariño y amor para ayudar a los
demás, porque esta enfermedad, aunque se investiga sin
cesar, da muchos golpes en la vida y hasta se los da a los
jóvenes”.
“Hemos de vivir todos los días como una fiesta; vivir todos
los días con solidaridad y transmitiendo paz” concluye Minu
Sunderdas.
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