“Hoy (por ayer) he leído en algún medio de comunicación que
el Ministerio hasta dentro de dos años no hará el colegio en
Loma Colmenar. Sí, efectivamente, el mismo día en que
tengamos el terreno no estará acabado el colegio,
necesitaremos dos años para hacerlo”. Esta frase,
pronunciada por el ministro Ángel Gabilondo, durante su
discurso oficial en la Facultad de Educación y Humanidades
provocó la risa del auditorio, que incluía a los máximos
representantes institucionales de la ciudad y, en la mesa,
junto a él, al presidente Vivas, al rector de la Universidad
de Granada y al decano del centro.
Pero la ironía del ministro no quedó ahí, pues arrancó una
segunda carcajada general cuando insistió en que “como hay
maneras distintas de decir las cosas, una manera de decirlo
es: hasta dentro de dos años el Ministerio no hará el
colegio o el instituto, y otra forma de decirlo es, en el
momento mismo en el que el Ministerio tenga el terreno
empezará a hacer el edificio; ahora, eso sí, tardará unos
días”.
El ministro quiso subrayar a continuación la “enorme
responsabilidad” con la que se celebró su reunión del día
anterior con Vivas para llegar, reiteró, a “acuerdos
realistas”, como el del colegio.
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