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Todos sabemos que el mundo cofrade es un tanto singular y
por mucho que se diga, hay juntas de gobierno o simplemente
cofrades que ‘se la cogen con papel de fumar’.
El pasado martes día 2 de noviembre publicábamos en este
rotativo en su página 19, la información de que en este mes
de noviembre se sabría quien será el pregonero de la Semana
Santa 2011, aportando dos nombres que están sonando por la
calle, Javier Pérez y Francisco Hernández, hermanos mayores
de ‘Las Penas’ y ‘Medinaceli’, respectivamente.
Al parecer esta información ha provocado que varios cofrades
con ganas de ‘fastidiar al prógimo’ y que desde hace algún
tiempo vienen enfrentándose a los integrantes de la mesa
permanente del Consejo de Hermandades, especialmente a su
presidente, Juan Carlos Aznar Méndez, hayan iniciado un
despiadado ataque contra este acusándole de filtrar esta
información a nuestro rotativo.
A este respecto tengo que decir que, pese a lo inteligente
que parecen estos señores cofrades, en ningún momento se
insinúa, ni se informa que dichos nombres hayan sido
facilitados por Juan Carlos Aznar ya que precisamente con
estos temas los integrantes de la mesa permanente simpre han
sido y siguen siendo muy cuidadosos y nunca han desvelado
nombre alguno.
Estos ‘cofrades dañinos’ deberían cuidarse mucho de ir
hablando por ahí como marujas de patio comentando con
cualquiera de su cofradía o de su hermandad las propuestas
porque lo único que consiguen con ello es que al final esos
candidatos se sepan, como así ha sido.
Como redactor y autor del artículo en cuestión debo
comunicar que la información de posible candidato de Javier
Pérez como pregonero de la Semana Santa de 2011 la conozco
desde hace varias semanas y se me fue comunicada durante una
conversación informal con un profesor de un centro docente
de la ciudad. Por su parte, el nombre de Francisco Hernández
también llegó a mis oidos gracias al presidente de una Casa
Regional de Ceuta.
Una vez dicho esto, lo que más rabia me da es que dentro del
mundo cofrade existan todavía personas que lo único que
busquen es ‘joder al prógimo’ por el simple hecho que no les
caiga bien y comiencen a tirar piedras contra su propio
tejado pese a no estar libres de culpa, consiguiendo
únicamente ‘emputecer el ambiente’ y dinamitar esos pilares
en los que teóricamente se sustenta este mundo cofrade.
Déjense de tonterías y trabajen conjuntamente por el bien de
las Hermandades y la Semana Santa de Ceuta, por su
engrandecimiento, que al fin y al cabo, si somos cofrades de
verdad, es lo único que nos debería importar.
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OPINIÓN
/
COLABORACION
