Los tres detenidos que ayudaron a huir, en la madrugada del
22 de octubre, al presunto autor de un tiroteo a un menor en
el Príncipe, podrían enfrentarse a una pena de incluso 7
años de cárcel por los delitos de atentado, alteración del
orden público y ayuda de evasión al detenido que les imputa
el Ministerio Fiscal. Estos, además, pueden permanecer
encarcelados hasta dos años ya que la investigación de los
hechos continúa abierta porque el fugitivo sigue en paradero
desconocido.
Impedir la detención de un acusado, atentando contra la
Policía y provocando desórdenes públicos que se saldan con
lesiones y daños puede suponer, para cualquier ciudadano,
enfrentarse a una pena de hasta 7 años de prisión. Y así de
crudo lo pueden tener los tres familiares del presunto autor
del tiroteo a un menor en el Príncipe, que continúa en
paradero desconocido después de que su madre, hermano y
amigo, junto a otros residentes de la barriada, lo ayudasen
a escapar la madrugada del pasado 22 de octubre cuando los
agentes del Cuerpo Nacional de Policía desplegaban el
operativo de detención.
En su calificación provisional de los hechos, puesto que la
investigación continúa abierta, el representante del
Ministerio Fiscal en la ciudad acusa a estos tres familiares
del prófugo de los delitos de atentado, desorden público y
ayuda de evasión de un detenido; delitos que sumando las
sanciones previstas en el Código Penal pueden alcanzar los 7
años de cárcel. Aunque dicha calificación puede verse
modificada en lo que respecto a las faltas de lesiones y
daños a los agentes de Policía se refiere ya que, según ha
podido saber EL PUEBLO, el forense necesitará una segunda
revisión médica de los policías para determinar el tiempo de
curación de las lesiones, lo que supondría que dichas faltas
llegasen a considerarse delito. Esto es, llegar a enfrentar
incluso 9 años de cárcel.
A expensas de dichas pruebas así como la búsqueda del propio
fugitivo, los tres familiares de este continuarán en el
Centro Penitenciario Los Rosales, tiempo que podría
prolongarse hasta los dos años en régimen de preventivo
hasta la fecha de juicio, según confirmaron fuentes cercanas
a la causa.
Tal y como informó EL PUEBLO, el revuelo en la barriada
comenzó sobre las 21:30 horas, cuando dos agentes de paisano
se toparon con el delincuente, al que identificaron y
esposaron para introducirlo en el vehículo policial. Pero en
dicho instante, varios vecinos que se percataron de la
acción policial, arremetieron contra el turismo, por lo que
los agentes solicitaron ayuda de las unidades que se
encontraban próximas a la zona.
Con toda la algarada en pleno auge, y según fuentes
policiales, los tres familiares del detenido junto a este,
se introdujeron en el bloque 13 de Príncipe Felipe. Justo al
día siguiente, la policía identificó a estas tres personas
que la semana pasada prestaron declaración ante la titular
del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2.
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