Una tranquilidad que no me gusta,
porque es simple y auténtica monotonía, sin alicientes de
ningún tipo, que es lo peor que puede suceder a cualquier
tipo de sociedad.
Esto, sin embargo, es lo que parece gustar a más de uno que,
llevado por la voz de su amo, odia todo lo que implique una
ilusión, salvo cuando esa ilusión significa enriquecimiento
para él o para alguno de los “apellidos ilustres” de la
ciudad.
Particularmente, prefiero el ambiente de los pasados días, y
no porque estuviera pensando en una eliminación del
Barcelona, frente al Ceuta, todavía no nos hemos caído de
ningún “guindo” para soñar despiertos.
Sin embargo, ese movimiento de los últimos días implicaba
que el nombre de una ciudad que es la gran desconocida,
saliera con fuerza fuera de nuestros límites geográficos y
apareciera como el centro deportivo de España, al menos por
unas horas.
A las pruebas me remito, docenas y docenas de acreditados de
la prensa nacional: Sport, Mundo Deportivo, As, Marca,
Agencia EFE ..., así como emisoras de radio: RNE, Radio
Marca, Cadena COPE, Cadena Ser, Onda Cero y todas las
emisoras catalanas junto con las televisiones, todas ellas
que querían y tienen imágenes de Ceuta.
¿A cuanto asciende el valor de la publicidad que se ha hecho
a Ceuta, durante las dos horas del partido, los días antes y
la resaca posterior?. Es muy difícil calcularlo, pero nos
quedaríamos cortos, si “a precio de mercado” habláramos de
cientos de millones de las antiguas pesetas.
Y esa publicidad la ha hecho la AD Ceuta, al haber
confeccionado un equipo capaz de pasar tres eliminatorias
antes y haber llegado a enfrentarse con uno de los grandes.
Y a esto se ha podido llegar porque se ha hecho un equipo
para intentar estar arriba, no para ser décimo, con lo que
la subvención, que no es nueva este año, aunque sí inferior
a la pasada temporada, por ejemplo, se ha empleado, en
principio, en orden para que repercuta en beneficio,
también, de Ceuta.
Visto esto, me extraña, aunque en Ceuta las envidias y
rencillas personales son capaces de cualquier cosa, que haya
quien diga o haya escrito que con la taquilla de este año en
la Copa del Rey, ya tendrá que ser inferior la subvención
del próximo año.
Una persona con experiencia en medios de comunicación y
conociendo lo que conoce, comete una tremenda osadía al
llegar a esas conclusiones, más propias de vendedores de
humo que de profesionales de prensa o de radio.
Es lamentable, pero así es, que quienes se han pasado
decenas de años añorando un Ceuta en superior categoría,
ahora, por enemistades ajenas, no sepan distinguir “el trigo
de la paja”.
Y es que, para quienes llevamos años en esto, y seguimos
estando ahí, esta taquilla podrá servir para reforzar, si es
necesario, más la plantilla, con vistas a un posible
ascenso.
De esas otras formas, se saldría a competir y sólo a eso,
con mucha tranquilidad y con la “esperanza” de volver a ver
en Alfonso Murube al Lucena, al Caravaca, al Ejido, al
Jumilla y compañía, pero nada más.
¿Se quiere valorar, de verdad, la promoción de Ceuta?. Eso
es lo que creíamos que querían todos, especialmente aquellos
a los que se les llena la boca de su Ceuta, para lo que les
conviene, no para lo necesario, de verdad.
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