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La voz de alarma sobre la
avalancha de inmigrantes que sin papeles llegaban a Europa
la hizo saltar el presidente francés, Sarkozy, que después
de la quema de coches en París decidió salir a la caza de
todos aquellos que no tuviesen sus papales en reglas para
permanecer en suelo francés.
Las criticas, al presidente de los franceses, le vinieron de
todos los lados, especialmente de aquellos “progres de
pacotillas” que tanto abundan, sin tener ni p… idea de los
que es y significa el verbo progresar.
Pero esos que tanto criticaron a Sarkozy, se han visto
sorprendido porque, en estos momentos, es toda Europa la que
está de acuerdo con acabar con esa avalancha que les llega,
sin saber que poder hacer con ella, y más si tenemos en
cuenta la crisis económica que atraviesa el Viejo
Continente.
La presidenta de los alemanes de Alemania, Ángela Merkel,
cree que el modelo social multículturalista ha fracasado en
Alemania. O sea, mantiene la teoría, que en muchas ocasiones
hemos escrito en esta misma página de opinión, que una
inmensa mayoría de los inmigrantes que les llegan evitan
integrarse en el país que los acoge.
Como diría la sabia de mí abuela: ”a buenas horas mangas
verdes”. Le hubiese bastado, a la presidenta de los
alemanes, haberme consultado, porque eso de no aceptar la
integración a los países donde llegan, lo vengo diciendo
desde que un inmigrante español?, salió a hablar de la
inmigración española en una cadena de televisión.
La mayoría de los inmigrantes que llegan a cualquier país
europeo, preferentemente España, Francia y Alemania, sobre
todo los de habla no hispana, no quieren integrase ni
aceptar las leyes del país que les acoge. Ellos tratan de
imponernos su cultura, sus costumbres y sus tradiciones.
Ahora, eso sí, a la hora de reclamar los derechos que esos
países tienen son los primeros en hacerlo.
El modelo, como bien dice la presidenta de los alemanes, ha
fracasado por culpa, única y exclusivamente, de todos
aquellos inmigrantes que no se quieren integrar ni, por
supuesto, aceptar las leyes, las costumbres y las
tradiciones de los países a los que llegan.
España ha pasado de “papeles para todos”, con una regulación
masiva a todos aquellos que de forma irregular estaban en
nuestro país, a sumarse de forma entusiasta a la propuesta
de Bruselas de dedicar una semana experimental a la “caza de
los sin papeles”
Según la UE la finalidad de esta iniciativa es estudiar, a
partir de las detenciones que se realicen, el comportamiento
de los flujos migratorios en el continente.
Que duda cabe que esta decisión a los “sin papeles”, va
unida a la crisis económica y a la necesidad de muchos
países de buscar una paz social, que se puede ver
desequilibrada por culpa de la inmigración, ahora que el
trabajo brilla por su ausencia.
La única forma de luchar contra esa avalancha de sin
papeles, es que, todo aquel que llega y no quiera aceptar
las leyes, costumbres y tradiciones sino por lo contrario
imponer las suyas, se les envíe de forma urgente de regreso
a su país de origen.
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OPINIÓN / MIS COSAS
