El director del Instituto de Estudios Ceutíes (IEC), Simón
Chamorro, aseguró ayer que el organismo ha dejado “en manos
de los Servicios Jurídicos de la Ciudad” el proceso
contencioso-administrativo que el equipo de investigadores
dirigido por el profesor de la Universidad de Cádiz Rafael
Jiménez Gámez piensa incoar por la no aceptación de la
memoria de su informe ‘Explorar y comprender el fracaso
escolar en el contexto multicultural de Ceuta’.
Chamorro eludió hacer ninguna valoración añadida sobre el
conflicto. Tal y como informó ayer este periódico el IEC
comunicó, vía correo electrónico, el pasado mes de marzo a
Jiménez Gámez que debía devolver el anticipo del 10% de la
cuantía total de la beca concedida [4.500 euros] al entender
que existía un “incumplimiento de los objetivos planteados
en el proyecto inicialmente aprobado” y que “no existe
congruencia entre éstos y las conclusiones obtenidas”, algo
que los autores del trabajo, entre ellos un grupo de
profesores y alumnos ceutíes de la Facultad de Educación de
la UGR, han rechazado rotundamente en un extenso documento
de respuesta que no ha sido asumido por el IEC.
Los autores del estudio en cuestión, que entre otras cosas
concluía que sería preciso un cambio de la metodología
docente para mejorar los resultados académicos en la ciudad,
aseguran sentirse “indefensos” ante la decisión del
Instituto, basada en las opiniones de “tres expertos en la
materia” (de los cuales al menos uno no comparte este
criterio) y de los directores de los directores de los dos
centros educativos en los que Jiménez y su equipo realizaron
el trabajo de campo de su informe. De los cuatro trabajos
becados por el IEC en el marco de una Convocatoria
Extraordinaria para analizar el fracaso escolar en la
ciudad, publicada en 2007, han sido recibidos y aceptados
dos de los informes. Otro de los autores se retiró. El de
Jiménez y su equipo ha sido el único rechazado.
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