El ciberataque de los cibermamarrachos
 

Nuria Van Den Berghe
nuriavandenberghe@elpueblodeceuta.com
 

Está visto que, en esta Ceuta marinera, hay personas o grupos que o no conocen, o no saben respetar las reglas del juego democrático, o son más tontos que planchar un pantalón vaquero con la raya en medio.

Y digo esto porque, la versión digital de este periódico recibió el pasado domingo diecisiete un ciberataque por parte de delincuentes informáticos y en el momento en que escribo estas líneas nuestro elpueblodeceuta.com sigue bloqueado, los hechos denunciados ante los de Delitos Informáticos de la Policía Judicial y la investigación abierta para capturar a los enemigos de las libertades de expresión y de opinión.

Cibermamarrachos. Porque, al final se les pilla y se les mete el célebre “paquete” en forma de imputación penal. ¿O es que se creen más listos que los Pitagorines del grupo de Delitos Informáticos? Más listos no lo son, lo garantizo, pero más bajunos sí. Y más ignorantes y cazurros también. ¿Qué dicen? ¿Qué si nos encontramos ante piratas informáticos de ideas extremistas que tratan de silenciar las informaciones veraces que caracterizan a este diario? Vale, vale, colegas, ahora podría pontificar diciendo que esos cibermierdas son auténticos “enemigos de las libertades” y cursiladas del lenguaje políticamente correcto similares. Pero paso y como cristiana no puedo caer en la facilidad ramplona e hipócrita de la corrección política, porque dijo nuestro Señor Jesucristo que “a los tibios los escupiría de su boca”,así que de tibieza nada, mayormente para no ser relegados a la categoría de escupitajos .Y caña a los ciberatacantes que se comen los mocos de envidia ante nuestra singular grandeza de miras y la rara ecuanimidad que nos caracteriza a quienes participamos en este invento ceutí que es El Pueblo de Ceuta.

De hecho hay dos :España y el extranjero, que se hacen lenguas de lo ecuánimes que somos. La Merkel comentó el otro día en el Parlamento Europeo “¡Pero miren ustedes la ecuanimidad tan grande que tienen estos ceutíes, son pechá de ecuánimes!” ¿Qué por qué podemos definirnos así? Bueno… La verdad, ejem, es que no lo sé, pero suena elegante y de buen tono, muy a lo Carmen Lomana, suena tan fino como “magnánimo” y “ponderado”. Vale, eso, nosotros lo somos todo y más y por eso nuestros enemigos, en lugar de enfrentarse a nuestras ideas y opiniones a nivel juzgados, porque no damos razón para ello ya que decimos la verdad aunque no nos la cogemos con papel de fumar como otros. O llevar a cabo enfrentamientos más castizos en plan puerta de bar o cafetería, pero con buen rollo y sin acritud, van y pagan a un jilipollas de esos que pasan más hambre que un jubilado el día 28 de cada mes y el mameluco se mete a hacker y lanza el software, que en mi barrio se dice “sofguá” para callar por lo solapado y cobarde lo que no son capaces de callar como tíos y con dos pares de huevos.

¿Ahora que murmuran en su santa indignación? Sí, me lo pueden decir porque soy ecuánime y magnánima y todo ese rollo lomanista ¿Qué si pienso que los directivos del pueblo son como yo de poligoneros, porque saben que me he tirado de los pelos con todas las corraloneras de mi bloque? ¡Mienten! ¿O es que son ustedes por un casual los cibermamones que atacan ideas ajenas? Yo no me he peleado con ninguna vecina. Bueno, como creyente no puedo mentir, es cierto que, en ocasiones, he tenido algún desencuentro dialéctico algo alterado, pero nada más. Pero cara a cara. Que la leche de España no es de meter anónimos por debajo de la puerta y salir corriendo, ni de atacar la opinión del de enfrente, no con ideas, sino con cibersabotajes anónimos que son más fáciles y dan menos que pensar y esforzarse.

Para combatir y rebatir las ideas con ideas hay que tener tres cosas : intelecto, preparación y cojones para despellejarse los codos obteniendo esa preparación. Y las ideas preclaras brillan por su ausencia en nuestros presuntos (por ahora) enemigos y el intelecto no lo tienen porque lo perdieron jugando a los triles y la preparación menos aún , aunque no es delictivo tener faltas de ortografía hasta en la huella dactilar y celulitis en las neuronas de no usarlas. ¿Qué si nos ha afectado el ciberterrorismo antidemocrático y tal Pascual? Verán, todo hecho delictivo lleva aparejada una responsabilidad civil y esta, por el tipo de delito y el perjuicio causado, va a ser bastante cuantiosa y hay muchos jubilados en Ceuta con “paguillas” a quienes un regalito para las Navidades puede venirles de auténtica escandalera.

¿Qué como va a acabar la temática-informática-internáutica? Pues con los máquinas de la Policía Judicial llamando a una puerta “¡Toc, toc! ¿Quién es?” Pero en lugar de decir “Una rosa y un clavel” como en la canción se dice “Los que te venimos a ciberjoder” y todos tan contentos. Y los jubilados más.