La Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión
Social en Melilla (EAPN Melilla) convirtió ayer la Plaza de
San Lorenzo en un lugar de encuentro en el que a través de
juegos, música y poesías, se reivindicó una actuación real y
efectiva para acabar con la pobreza en el mundo. Uno de los
momentos más intensos se vivió con la intervención de Amalio
Jiménez, escritor melillense, que condenó con la fuerza de
la palabra la expulsión de los inmigrantes bengalíes después
de cinco años esperando una oportunidad en Melilla. Jiménez
dijo de ellos que después de este tiempo en la ciudad, se
han convertido en la “comunidad bengalí melillense.
El acto central en Melilla del Día Mundial de Lucha contra
la Pobreza, se convirtió en un escenario en el que la música
y la palabra fueron los vehículos utilizados por los
artistas melillenses que se dieron cita en la convocatoria
de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión
Social en Melilla (EAPN Melilla) en la Plaza de San Lorenzo.
Con una duración superior a las dos horas, el
concierto-recital contra la Pobreza fue una demostración
viva de la sensibilidad de los movimientos culturales
melillenses hacia esta lacra mundial. A pesar de la calidad
del espectáculo y de que se incluyeran distintos talleres y
juegos para los pequeños de casa, la afluencia de público no
fue la esperada, aunque sí que se dieron cita unas cien
personas.
El espectáculo, presentado por el mago Jesús Castejón, contó
con la activa presencia de la Asociación de Intérpretes de
Lengua de Signos (Oídme) y se llevó a cabo gracias a la
colaboración del Ministerio de Sanidad y Política Social y
la Viceconsejería de Festejos. A lo largo de la mañana
subieron al escenario a mostrar su arte y apoyo a la causa,
el conjunto musical “Bellido Póker Quarter”, Dique Sur, el
grupo “Mansilla&Gil”, la coreógrafa “Noe” y su grupo y el
Sindicato Nacional de Escritores a través de Amalio Jiménez,
Manuel La Parra, María Alcaraz, Guillermo Reus, Fortu Bitán
y Carmen del Pino. En los alrededores de la Plaza también se
organizaron diversos juegos para los más pequeños, como el
paracaídas arco iris o los talleres de globoflexia y pintura
de cara.
El público adulto disfrutó sin duda de la altísima calidad
de las actuaciones musicales, empezando por el decano de los
presentes, Dique Sur, con la magnífica voz de Mabel y su
hermano, el ya neurólogo y músico Jesús Romero Imbroda,
hasta seguir con descubrimientos tan gratos como el arte
desplegado por el conjunto “Bellido Póker Quarter”. Pero
además los asistentes tuvieron la oportunidad de escuchar no
ya los poemas del Sindicato de Escritores, sino también el
alegato que contra la expulsión de los inmigrantes bengalíes
ofreció Amalio Jiménez, antiguo representante político y hoy
activo escritor local.
Jiménez, una vez en el escenario, se colocó sobre los
hombros una prenda típica que lucen los hombres en
Bangladesh, para recordar a Alí, un joven inmigrante bengalí
con el que tuvo ocasión de entablar amistad y cuya historia
viene a ser la de todos aquellos que permanecieron durante
cinco años en esta “frontera física” que fue Melilla,
impidiéndoles acceder a la Península, un sueño en el que
embarcaron sufrimientos, penas y todo su patrimonio, y que
finalmente ha quedado en nada. “Alí está ahora en el Centro
de Internamiento de Inmigrantes de Barcelona, después de que
se lo llevaran de Melilla con cincuenta compañeros más, y
nada sabe de su futuro”. Amalio Jiménez condenó el que no se
les hubiese expulsado cuando llegaron a la ciudad o no se
les documentara después de tanto tiempo, y aseguró que Alí y
el resto de sus compañeros “son tan melillenses como
nosotros”, después del tiempo vivido en esta ciudad. Sin
duda son ahora “la comunidad bengalí melillense en el
exilio, a los que han sacado de aquí a la fuerza”.
Con el acto de ayer la Red Europea de Lucha contra la
Pobreza y la Exclusión Social en Melilla (EAPN Melilla)
quiso recordar que la pobreza sigue en aumento y la justicia
social se reduce, “porque más de 1.400 millones de personas
viven en situación de pobreza extrema y casi 1.000 millones
pasan hambre a diario”. “Como ciudadanos comprometidos
tenemos mucho que hacer y decir para contribuir a construir
un mundo mejor”.
Melilla no se escapa de esta lacra ya que, según el último
estudio llevado a cabo por la Ciudad Autónoma (primer
semestre del año 2010), el porcentaje de hogares y personas
bajo el umbral de pobreza se sitúa en torno al 30% de los
hogares de la Ciudad, y afecta a una población de 19.800
personas, lo que supone el 27,8% del total, un porcentaje,
muy por encima de la media nacional.
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