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El taxi adaptado para personas con movilidad reducida no ha
frustrado las expectativas de su propietario. A los dos
meses de su funcionamiento, el servicio recibe hasta quince
llamadas diarias de personas con discapacidad motórica. La
mayoría de ellas demandan traslados a las consultas médicas
del Hospital Universitario, con la ventaja de que se trata
de servicios casi siempre de ida y vuelta.
Desde hace aproximadamente dos meses la ciudad vuelve a
contar con un servicio del que ha carecido durante mucho
tiempo y que constituía una demanda constante de los ceutíes
con problemas de movilidad reducida: un taxi adaptado, que
según su propietario, Musacri, tiene cada día más servicio y
recibe cada día más llamadas. “Los usuarios están contentos
porque ven que se tiene en cuenta su discapacidad”, indicó
el taxista.
Según prosiguió explicando, lo que recibe son sobre todo
llamadas en demanda de traslados a las consultas médicas del
Hospital Universitario. Una circunstancia que se aprecia en
los picos de demanda. Los días laborables, cuando funciona
el centro médico, el taxi adaptado puede recibir entre ocho
y quince llamadas. En fin de semana, en cambio, cuando no
funcionan las consultas médicas, la demanda se reduce a la
tercera parte.
Hay clientes habituales pero también se van recibiendo cada
vez más llamadas de nuevos usuarios. El servicio compensa,
según el taxista, porque en la mayoría de los casos son de
ida y vuelta.
El vehículo adquirido por Musacri para su adaptación a
personas con movilidad reducida es de la marca Volkswagen
modelo Caddy Maxi, y dispone de rampa, espacio para sillas a
motor o manuales, freno para la silla y cinturón de
seguridad. Los clientes van tranquilos, dice el taxista, que
procura conducir a una velocidad adecuada para perturbar lo
mínimo al usuario.
La inversión del taxista en este vehículo adaptado ha
superado los 30.000 euros. Ahora está esperando las ayudas
prometidas por entidades como la Ciudad Autónoma o la
Fundación ONCE.
Naturalmente, no todo es un camino de rosas. El taxi
adaptado tiene la consideración de unidad única y, por
ejemplo, el día de la huelga general ni Musacri ni el
trabajador asalariado que tenía contratado hasta su
repentino fallecimiento pudieron ejercer este derecho.
Con un conductor auxiliar, el taxi puede estar en servicio
las veinticuatro horas del día, a excepción de la parada que
realiza entre las tres y las cinco de la tarde, según
continuó relatando el propietario del vehículo y la
licencia.
Prestar un servicio especial no le impide tampoco realizar
trayectos con clientes no discapacitados cuando las personas
con movilidad reducida no aportan suficiente demanda.
De esta manera, el negocio va adquiriendo cada vez más
solvencia a pesar de la tardanza en llegar de las ayudas
comprometidas.
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