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Dakar es la cuna y la meta del 4x4. Todo aquel que aprecie
el todoterreno sueña con llegar algún día a Dakar. Cumplir
actualmente este objetivo es aun más importante y difícil
por razones obvias. Pues bien, esto se ha conseguido
recientemente por unos intrépidos expedicionarios ceutíes.
La idea de hacer el viaje partió de Alfonso Morón López que
lo comentó a su entorno más cercano de moteros. Tras varios
meses preparando el viaje hace tan sólo unas semanas que
consiguieron llevar a cabo este sueño y llegaron hasta Dakar
para posteriormente regresar a Ceuta, convirtiéndose así en
pioneros en esta iniciativa.
Tres intrépidos ceutíes realizaron hace unos días el viaje
Ceuta-Dakar-Ceuta, consiguiendo así cumplir el objetivo
marcado desde un primer momento y convirtiéndose en los
primeros ceutíes en realizar esta expedición desde la ciudad
de Ceuta.
La idea de hacer el viaje partió de Alfonso Morón López
quién lo comentó a su entorno más cercano de moteros. Se
acababa de comprar una BMW 1200 y qué mejor modo de
estrenarla que con un viaje de éstos.
Finalmente, se gestó en el mes de junio y tomó cuerpo y
forma en la noche de San Juan, buscando un coche de apoyo.
Se invitó a participar a Antonio Paz, presidente del Club
KYM 4x4, hombre experto en estas lides y con un vehículo muy
bien preparado. No lo dudó ni un momento y se mantuvo firme
en el proyecto.
La expedición la componían los expertos pilotos de Ceuta,
Domingo Ramos, César González y Alfonso Morón, miembros del
Grupo Motor Aventura Ceuta, montados sobre HONDA África Twin
750, KTM Adventure 990 y BMW RS 1200, tres mecánicas muy
distintas, la clásica e histórica África Twin, la mejor en
prestaciones off road y la más vendida respectivamente. El
coche era un Land Rover Santana, propiedad de Antonio Paz,
acompañado de José Madueño, directivo del Club Adventure
K.Y.M. 4x4 Extreme.
Por razones de seguridad evidentes, no se quiso dar
publicidad ni detalles de fechas y ruta programadas antes de
comenzar el mismo. Ahora felizmente se puede decir que el
objetivo ha sido cumplido.
Antes de la salida hubo que solucionar muchos problemas en
un corto espacio de tiempo. Equipo material, preparación de
coche y motos, visados, y vacunaciones contra la fiebre
amarilla, tétanos, hepatitis A y B así como profilaxis del
paludismo. Se ha estado a tan solo 9º de latitud del
ecuador, sobrepasando el trópico de Cáncer.
Paso rápido por la costa atlántica de Marruecos y el Sahara
occidental aguantando un calor sofocante que iba aumentando
según bajaban los grados de latitud.
Entrada en Mauritania tras esperar 7 horas en la frontera y
eso que se llevaban todos los visados en regla. Ruta por la
actualmente famosa carretera desde Nouadhibou a Nouakchott.
Carretera muy vigilada por el ejército con controles cada
cierta tanda de kilómetros que aseguran el paso a los que la
transitan. Una parada de noche imprevista por culpa de un
pinchazo, alertó al siguiente control al ver que no llegaban
y salieron a buscarlos.
Salida rápida por la frontera sur y entrada complicada en
Senegal por elegir una ruta más todoterreno para evitar
tanto asfalto. Llegada a Sant Louis camino hacia Dakar
accediendo por la playa colindante al Lago Rosa: el sueño de
todo aficionado o profesional del todoterreno, ya sea en
coche o moto.
Afortunadamente, viaje sin grandes incidentes y que sirve de
toma de contacto y comprobación ‘in situ’ de las necesidades
y probabilidades de abrir rutas hacia el sur más allá de
Marruecos.
Han sido 14 días de viaje, 7.300 Km., en su mayoría
carretera alternado con pistas, cruzando las fronteras de
Marruecos, Sáhara Occidental, Mauritania y por último, la de
Senegal, hasta que el pasado día 8 de octubre culminaron con
éxito su proyecto. Se han llegado a hacer etapas de
1.100Kms. Ha sido una difícil empresa: los muchos kilómetros
recorridos, los trámites y dificultades fronterizas, los
controles policiales, el sofocante calor, averías y
pinchazos, a veces la falta de bebida y comida … y sitios
donde pasar la noche.
Los aventureros motoristas ceutíes destacan que la llegada a
Dakar fue muy emocionante, desde el Lago Rosa hasta la
capital a través de su playa, tal y como se hacía en última
prueba del más famoso rallye del mundo.
Muy emotivo fue también el encuentro con otro grupo de
moteros de Ceuta, “destino DAKHLA”, que compartieron mantel
durante una amena cena en el Hotel Sáhara de Dakhla y
tuvieron ocasión de contarse mutuamente las experiencias de
sus respectivos viajes.
Al ser un grupo mixto coche-motos, ambos tuvieron que
adaptarse unos a otros. Así, el coche se tuvo que parar en
los pinchazos de ruedas de las motos (más frecuentes) y las
motos se tuvieron que adaptar a una velocidad media más
lenta del coche y a las averías mecánicas del mismo.
Imprescindible ha sido la ayuda inestimable del mecánico,
copiloto del TT que las ha solventado sin problemas , y que
hacen inviable un viaje de estos sin la presencia de un
mecánico.
Los moteros destacan que es sorprendente la cantidad de
españoles que se encontraron allí abajo. El hotel de
Nouakchott donde se hospedaron estaba regentado por un
canario, al igual era español el de El Aium, así como otros
expedicionarios que se han encontrado por el camino.
Magnífica acogida por los nativos tanto de Mauritania como
del Senegal donde al verlos, añoraban en cierta medida la
carrera Paris-Dakar.
Los motoristas agradecen en este reportaje la protección y
facilidades dadas por las autoridades de los tres países que
han atravesado.
Finalmente, ahora pueden decir que queda abierta la frontera
sur de Marruecos para futuras expediciones de este tipo de
viajes.
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aventura
