Un año de prisión fue la petición de condena de la Fiscalía
para un joven al que imputaba un delito de robo con fuerza,
concretamente, mediante le método del butrón. Por su parte,
la defensa solicitó al absolución de su cliente, que alegó
haberse encontrado sobre el tejado de una perfumería al
intentar buscar el móvil de su amigo, y que él había
lanzado.
“Estaba bromeando con mi amigo y le tiré su móvil a un
tejado creyendo que luego se deslizaría solo hacia abajo.
Entonces le pedí permiso al del hotel de al lado para subir
al tejado y recuperarlo pero no tuve nada que ver con la
perforación de una perfumería”. De estos hechos partió el
juicio celebrado ayer en la sala de lo Penal por el que un
joven ocupó el banquillo de los acusados por un presunto
delito de robo con fuerza, por el que el Ministerio Público
pide un año de cárcel para el procesado. Según el encargado
y el propietario del establecimiento, la pared trasera del
mismo tenía una perforación a varios metros de altura con
respecto al suelo, siendo conscientes de los hechos ya que
el sistema de seguridad saltó y la señal acústica lanzó el
aviso a los agentes de Policía, popularmente conocido como
el método del butrón. Estos manifestaron haber acudido a la
zona y no ver a nadie durante la inspección del local, en el
que tampoco faltaba ningún objeto. Sin embargo, cinco
minutos después de las dos y media de la madrugada, la
Policía recibiría un nuevo aviso ya que una vecina de la
zona había divisado a dos jóvenes en el tejado del mismo. A
este respecto, uno de los agentes aseguró haber preguntado
al acusado qué estaba haciendo por el tejado y que este no
había escapado de la zona, además de añadir el que no
hubiera contemplado martillo alguna en su posesión. Mientras
que otro argumentó haber contemplado a dos chicos corriendo
por los tejados colindantes. El juicio tuvo que ser aplazado
hasta el próximo 9 de noviembre ya que la defensa consideró
necesarios los testimonios de otros dos policías que no
comparecieron en la sesión de ayer.
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