Analizar el impacto de la crisis económica sobre los ceutíes
será el objeto de estudio de la Consejería de Asuntos
Sociales durante los próximos meses. Dicha área está
llevando a cabo un proyecto mediante el cuál se comparará
con años anteriores el número de usuarios que atienden los
Servicios Sociales así como la reincidencia de los mismos,
muestreo que se ceñirá al propio registro del organismo
municipal.
A través de la estadística comparativa y el análisis de la
población, la Consejería de Asuntos Sociales se ha planteado
como objetivo, para los próximos meses, conocer cuál es el
impacto de la crisis económica sobre los ceutíes.
Así lo adelantó el pasado martes la portavoz del Ejecutivo,
Yolanda Bel, tras el Consejo de Gobierno, y confirmado la
propia consejera del área, Carolina Pérez, quien explicó que
el proyecto aún está cogiendo forma aunque sí tiene claras
sus líneas de investigación y posterior análisis. “La
muestra de población se extraerá directamente del registro
estadístico que poseen los Servicios Sociales ya que este
contiene información de los ceutíes de las diferentes
barriadas de la ciudad”, explicó la responsable de Asuntos
Sociales.
Una vez recogida toda la información de los usuarios de
dicha Consejería, se llevará a cabo un estudio comparativo
para conocer si estos mismos ceutíes han solicitado ayuda en
años anteriores o, si en un mismo ejercicio, su solicitud se
ha reiterado a lo largo del tiempo. “Tenemos que saber
cuántas personas requieren nuestros servicios de manera
puntual y en cualquiera de sus formas. O si se repiten en
muchas ocasiones, estudiando y valorando la situación
personal de cada demandante”, aclaró Pérez.
Las ayudas puntuales pueden traducirse en recibos de agua o
luz, mientras que, por ejemplo, el Ingreso Mínimo de
Inserción Social (IMIS) es una prestación que puede
prolongarse en el tiempo. Aunque combinando las dos
modalidades también se situaría en la cartera de Asuntos
Sociales la opción de alojamiento alternativo. “Hay usuarios
registrado que luego se dan de baja en cualquiera de estas
prestaciones porque encuentran un trabajo. O quizás, al
tiempo, regresen. Todo ello tenemos que verlo, comprobarlo y
analizarlo porque no todas son prestaciones económicas.
También tenemos familias que vienen a los Servicios Sociales
en busca de orientación, asesoramiento o un hecho puntal”,
apuntó la consejera de Asuntos Sociales.
Dicha área tiene registrada una media de entre 8.000 y
10.000 atenciones anuales aunque no todas son individuales,
es decir, “una misma persona o familia puede solicitar
nuestra atención varias veces o sólo una, depende. Y eso
también lo tenemos que baremar ya que, al menos, 4.000
atenciones no son sólo económicas. Pueden ser ayudas a
domicilio u otras líneas”, apostilló Pérez.
Una de las cifras que sí están computadas actualmente en el
registro de los Servicios Sociales y catalogadas bajo el
umbral de la pobreza extrema hace referencia a una media de
entre 200 y 250 familias ceutíes. Considerando la pobreza
extrema como la situación de un núcleo familiar con escasos
ingresos económicos o la carestía absoluta de los mismos.
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