Ocho días después de que Santiago Benítez, Ángel Fernández,
Miguel Fernández, Leonardo Jurado, Javier Casas y Fernando
Rodríguez partieran desde Ceuta en dirección a la antigua
Villa Cisnero para hacer realidad lo que han llamado
‘Destino Dakhla’, la aventura continúa y tal y como estaba
previsto según las informaciones enviadas por los moteros.
El pasado sábado, alrededor de las 8.30 horas daba comienzo
la iniciativa ‘Destino Dakhla’, una aventura que se ha ido
fraguando en los últimos meses. Hoy, ocho días después
Santiago Benítez, Ángel Fernández, Miguel Fernández,
Leonardo Jurado, Javier Casas y Fernando Rodríguez continúan
su periplo por tierras marroquíes según lo previsto y con el
objetivo puesto en llegar a la antigua Villa Cisneros.
Contando con el patrocinio de numerosas empresas de la
ciudad, entre ellas ‘EL PUEBLO DE CEUTA’, estos seis
motoristas aventureros, con sus provisiones de agua y comida
enlatada, su localizador GPS on-line -ya que están pasando
por zonas especialmente conflictivas en su aventura-, y, por
supuesto, sus motocicletas BMW 1.200GS cultimnaron ayer la
séptima etapa después de pasar por Foum-Zguid, Zagora hasta
llegar a Tamegroute, donde hicieron noche para continuar hoy
con esta emocionante aventura.
Los comentarios que llegan desde la página on-line que
poseen son muy positivos y a través de sus fotografías dejan
ver a los ciudadanos que los están siguiendo que la
experiencia está siendo magnífica, donde además de descubrir
nuevas culturas, deben de sortear enfrentamientos con el
clima y con el desierto -con sus largas y potentes lenguas
de arena que llegan, en algunos de sus tramos, a,
literalmente, comerse la carretera-. Sin embargo, como ya
comentaron estos moteros de la ciudad, “esta es una de
nuestras grandes aventuras; eso sin ninguna duda”.
Desde pasado sábado los amantes del moticiclismo de ‘Destino
Dakhla’ han recorrido destinos tan variados como Rabat,
Casablanca, Tarfaya o Esmara. Una vez llegado a destino,
actualmente se encuentran realizando el camino de vuelta a
Ceuta, por lo que están bordeando las fronteras de países
como Mauritania o Argelia. Es precisamente el regreso por
estas zonas una de las razones por las que los miembros de
esta expedición llevan consigo, en su localizador GPS, la
suerte de ‘botón del pánico’ con el que, en el caso de que
lo necesitasen si se viesen envueltos en alguna situación
conflictiva, serán rescatados inmediatamente.
Hasta la fecha no han sufrido ningún altercado y todo
continúa ‘a pedir de boca’ de ahí que muy pronto, estos seis
intrépidos aventureros motoristas, regresarán a Ceuta para
contar su experiencia.
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