Dos consejerías, responsables de los cuerpos y fuerzas y
seguridad del Estado, bomberos, Acemsa, técnicos de Fomento
y representantes de la Delegación del Gobierno, entre otros,
estuvieron ayer presentes en la reunión técnica convocada
por la Dirección General de Protección Civil y presidida por
el Consejero de Gobernación, José Antonio Rodríguez, para
preparar a la ciudad frente a la inminente temporada de
lluvias. La comisión analizó todos los puntos negros de la
ciudad en cuanto a riesgo de inundaciones, destacando las
barriadas de Almadraba y San Amaro por su peculiaridad
geográfica y sus posibilidades de evacuación.
El consejero de Gobernación, José Antonio Rodríguez,
presidió ayer un reunión de coordinación de efectivos
convocada por la dirección general de Protección Civil, en
la que también participaron la consejera de Sanidad, Adela
Nieto, el presidente de la Autoridad Portuaria, José
Torrado, y diferentes representantes de las fuerzas y
cuerpos de seguridad del Estado, bomberos, Fomento, Acemsa y
la Delegación del Gobierno, entre otros.
El motivo de esta reunión técnica que se celebró en el Salón
de Plenos era preparar la ciudad frente a las próximas
lluvias que pudieran caer de forma torrencial, analizando
cada uno de los puntos negros detectados y las acciones que
se habían llevado a cabo o faltaban por realizar para que la
red de saneamiento funcione a la perfección y el riesgo de
inundaciones pueda reducirse a la mínima expresión.
Los técnicos de Protección Civil presentaron un minucioso
dossier de las zonas más vulnerables al embate de las
lluvias detallando aspectos tan concretos como los vehículos
abandonados próximos a zonas de evacuación o aliviaderos
taponados como consecuencia de la acción natural o humana.
Rodríguez explicó a EL PUEBLO que los puntos más vulnerables
al riesgo de inundación eran las barriadas de Almadraba y
San Amaro. En la primera se han realizado obras de
reposición de la red de seneamiento y limpieza de desagües
para corregir las deficiencias anteriormente detectadas.
En el caso de San Amaro, prosiguió Rodríguez, el principal
problema es el agua que viene del Monte Hacho, que discurre
por toda la barriada hasta llegar a la playa, anegando
calles a su paso.
Otro punto que siempre ha sido especialmente conflictivo es
el Polígono del Tarajal. Sin embargo, continuó el consejero,
este problema se ha corregido con la reposición de la red de
desagüe y ya el año pasado respondió de manera bastante
aceptable.
El presidente de la Autoridad Portuaria, José Torrado, alabó
la labor de coordinación de Gobernación por su carácter
preventivo. Ello a pesar que durante el encuentro técnico se
puso de manifiesto que el puerto, al ser una de las zonas
más deprimidas de la ciudad, recoge la mayor cantidad de
agua aunque tiene una capacidad de evacuación limitada, por
eso mejorando la red del emisario podría también evitarse
que se produjeran inundaciones en otros puntos muy distintos
de la ciudad autónoma.
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