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Dos unidades de la Policía Nacional se vieron obligadas a
desplazarse hasta el Centro de Estancia Temporal de
Inmigrantes (CETI) local después de que un grupo de
subsaharianos causase revuelo en una de las dependencias
comunes del centro, concretamente en el comedor, golpeando
los cristales de la sala, profiriendo insultos contra las
Fuerzas de Seguridad y acabando enfrentándose a golpes,
según explicaron los propios internos a este periódico.
Los policiales nacionales que entraron en el CETI, donde
permanecieron durante más de media hora hablando con algunos
de los protagonistas de los hechos, se sumaron a la unidad
que custodia de forma permanente la entrada al centro para
prevenir cualquier intento de amotinamiento como el que los
trabajadores del mismo dijeron temer con inminencia la
semana pasada.
El suceso se saldó sin que ninguno de los agitadores fuera
detenido y también sin heridos, según testigos presenciales.
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