El servicio de bomberos tuvo que acudir en la tarde de ayer
a una vivienda del número 12 de la Avenida de Madrid debido
al incendio desatado en una cocina del tercer piso.
Según explicaron a EL PUEBLO desde el servicio
contraincendios, el fuego pudo partir de una vitrocerámica
donde se había dejado algo calentando, de manera que
prendieron las llamas quemando la campaña extractora, los
muebles de alrededor y la instalación eléctrica.
Cuando llegaron los bomberos, avisados a las 19.41 horas, un
gran número de los residentes del edificio habían decidido
bajar a la calle por iniciativa propia, una actitud que
desde el servicio de bomberos se calificó de error. “Cuando
llegamos les dijimos que subieran para sus casas y se
limitaran a cerrar la puerta. Salir a la calle por su cuenta
tiene el riesgo de encontrarte el fuego en la escalera”,
aclararon desde bomberos.
La vivienda siniestrada estaba ocupada en el momento del
incendio y cuando llegaron los bomberos ya se había
disparado un extintor sobre el fuego.
Hasta allí se desplazó el tren de ignición de viviendas,
compuesto por un coche escalera, dos bombas urbanas y un
vehículo auxiliar para transporte de personas. Para
extinguir el fuego se utilizaron ocho efectivos de bomberos
y un extintor de C02. Afortunadamente, no hubo que lamentar
ninguna desgracia personal.
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