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Los presidentes de las asociaciones de vecinos de las
barriadas de Poblado de Regulares y Príncipe Alfonso, Alí
Hamido y Abdelkamil Mohamed, defendieron ayer a la
Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV) tras
las críticas vertidas por el secretario general del PDSC,
Tarek Mizzian, en relación a la ausencia de niños en la
fiesta de la espuma que tenía previsto celebrarse en Loma
Margarita el pasado domingo.
Hamido quiso destacar que “por parte de la asociación de
vecinos de Poblado de Regulares se quiere decir que se ha
avisado a todas las barriadas. Puede ser que el día elegido
no haya sido el más apropiado por la fiesta de fin de
Ramadán que se celebró el viernes por la noche porque la
gente se va a visitar a sus familias. Además el tiempo
tampoco acompañaba. La asociación de Poblado de Regulares
fue allí con algunos niños pero muchos decidieron que lo
mejor era dejarlo por el mal tiempo”. El representante
vecinal de Regulares quiso destacar que “no ha habido ningún
boicot por parte de José Ramos” e insistió en que “la culpa
no es de la Federación de Vecinos”.
Desde la FPAV no se han querido realizar declaraciones “por
el momento”. El PDSC publicó ayer un comunicado de prensa en
el que se asegura que “el presidente de la Asociación de
Vecinos nunca informó de manera oficial” al partido “acerca
de la propuesta de la fiesta de la espuma ni consensuó los
horarios y que esta formación política presentó la propuesta
en la Ciudad Autónoma”. Según asegura el secretario general
del partido, Tarek Mizzian, “ningún presidente de barriadas
al cual iban destinadas las actividades lúdicas fue
informado ni invitado para que los jóvenes y niños fueran a
disfrutar de dicho evento”.
Sin embargo, el presidente de la asociación de vecinos de
Príncipe Alfonso, destacó que sí que habían sido informados
de la actividad. “Se había avisado de la fiesta y también se
habló con los niños. El proceso de información se ha llevado
a cabo como se tenía que hacer”. Según opinó Abdelkamil
Mohamed, “el PDSC también tendría que haberse involucrado un
poco y haber colaborado para avisar también a los jóvenes y
que la actividad saliera adelante”. Mohamed destacó que “fue
un día malo porque los niños estaban cansados con la
costumbre de acostarse tarde con el Ramadán. La FPAV no ha
tenido culpa ninguna”.
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