Los cinco turistas del ‘Funchal’ heridos en el accidente de
Marruecos e internados en el Hospital Universitario se
encuentran“estabilizados y en buen estado de salud”,
mientras que los cuerpos de las 9 víctimas estaban ayer en
en el Instituto de Medicina de Lisboa en espera de las
autopsias.
Los cinco turistas portugueses del crucero ‘Funchal’ que
están internados en el Hospital Universitario de la Ciudad
se encuentran “estabilizados y en buen estado de salud” tal
y como han informado las fuentes de dicho complejo
sanitario, que añadieron que “todavía van a pasar, para
completar su correcta recuperación, unos cuantos días más en
la ciudad”. Queda además, residiendo en Ceuta, la mujer de
uno de estos heridos, que tal y como informó ‘EL PUEBLO’ fue
dada de alta y espera a que su marido reciba también dicha
alta.
Fuentes de la Delegación del Gobierno en Ceuta han informado
además que dicha entidad se encuentra “interesándose de
manera constante” del estado en el cual los heridos del país
luso se encuentran, tanto en lo referente a su salud como en
lo referido a su seguridad y comodidad.
Por otra parte, el cónsul de Portugal en Ceuta, José Ríos
Claro, ha explicado a este periódico que, en compañía de la
empresa ‘Classic International Cruises’, propietaria del ‘Funchal’,
no deja de “llamar al hospital a todas horas, mañana y
tarde, para controlar la evolución, que hasta ahora es
tremendamente favorable, de los heridos en el accidente de
Marruecos”.
Los cuerpos, en Lisboa
El ‘Correio da Manhä’, uno de los periódicos portugueses más
emblemáticos, publicó ayer que, en aquella misma mañana, los
cuerpos de las 9 víctimas del accidente ya habían llegado al
Instituto de Medicina Legal de Lisboa para que se les
practicasen las debidas autopsias y para que fuesen
posteriormente entregados a sus familias.
En las páginas de este mismo diario luso se podía leer
también que “de los 36 heridos en el accidente, 13
regresarán a Portugal en los próximos días”. El ‘Correio da
Manhä’ especificaba además que estos heridos se encontraban
internados en Ceuta y en la ciudad vecina marroquí de
Tetuán.
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